La mujer de 63 años que este lunes apuñaló a su marido por la espalda en el domicilio familiar de la calle Amalio Gimeno de Castellón ha ingresado en prisión provisional, acusada de un delito de intento de homicidio. Así lo han confirmado a este diario fuentes de la Policía Nacional, el cuerpo que se vio obligado a forzar la puerta del domicilio con una maza para sacar a la agresora, que se había atrincherado en el interior del inmueble y no respondía.

El brutal ataque, que publicó Mediterráneo en exclusiva, todavía es el tema de conversación por excelencia entre los vecinos del barrio, que no se explican qué pudo pasar entre la pareja.

En primera instancia, víctima y agresora fueron derivados al Hospital General de Castellón. Él presentaba dos heridas realizadas con un gran cuchillo de cocina --de las que todavía se recupera-- y ella un ataque de ansiedad y algunas lesiones en las muñecas que se había hecho ella misma.

Tras recuperarse de sus lesiones, la detenida fue trasladada a la comisaría provincial de la Policía Nacional de Castellón y los agentes la llevaron el miércoles ante el juzgado de guardia, que acordó su ingreso en la cárcel.

Todo sucedió sobre las 13.00 horas del lunes, en la tercera planta del inmueble. Los lamentos y gritos de auxilio del herido, que logró bajar malherido hasta el portal, alertaron a los vecinos.

Los primeros testigos socorrieron al hombre y descubrieron que tenía la espalda llena de sangre. Avisaron a las autoridades y varias patrullas de la Policía Nacional se trasladaron rápidamente al lugar, así como también los medios sanitarios. «Eran un matrimonio la mar de normal y nunca hemos oído nada raro», repetían los residentes en la finca, atónitos tras lo ocurrido.

La detenida carece de antecedentes policiales y podría haber sufrido fuertes episodios de depresión. Sus conocidos no se explican todavía qué le pudo suceder a la mujer encarcelada.