Uno de los principales atractivos turísticos de la localidad de Viver es su villa romana, El Prado, formada por diversas estructuras correspondientes a una típica villa romana del periodo alto imperial, fundada hacia el siglo I d.C. y abandonada en el siglo III d.C.
Este yacimiento arqueológico fue descubierto, y parcialmente excavado, en 2007, durante el seguimiento arqueológico de la instalación de la línea eléctrica de evacuación del parque eólico de la zona 6 del Plan Eólico Valenciano.
La excavación, dirigida por H. Fernández y A. Gómez, dejó a la luz diversas estructuras de una villa romana del periodo alto imperial. Posteriormente no se realizaron más actuaciones en el yacimiento, hasta el verano del año 2013, cuando el Ayuntamiento de Viver adquiere las parcelas en las que se encuentra ubicado, pasando éste a ser propiedad municipal.
En diciembre de 2016 se puso en marcha el Proyecto de puesta en valor de la villa romana de El Prado, con el objetivo de salvaguardar los restos excavados (consolidando los muros existentes) y los no excavados (eliminando el arbolado de las parcelas).
En el verano de 2017 se desarrolló la primera Campaña de excavaciones en la villa romana de El Prado, organizada por el Instituto Valenciano de la Juventud (IVAJ) y cofinanciada por el Ayuntamiento de Viver.
Pese a que se excavaron varios sondeos arqueológicos, solo se ha intervenido en el denominado sondeo central, donde se excavó un área de 175 m2, que permitió la documentación e identificación de diversas estructuras y zonas.
Dentro del sondeo se puede ver un pequeño edificio termal (balneum), con las diferentes estancias que lo identifican, además de otras zonas interpretadas como vivienda o zona de trabajo. Se trata de un edificio rectangular, con disposición este-oeste, realizado con roca tobacea (tosca) por su capacidad aislante.
Dependencias
La primera sala era el tepidarium o sala del baño templado, en la que se conservaba una bañera (alveus). Además, podía ser utilizada como vestuario (apodyterium).
La otra sala era el caldarium o sala del baño caliente, que se hallaba sobre el hipocausto, un sistema que permitía la circulación del aire caliente bajo el suelo y entre las paredes.
El conjunto se completaba con el propigneum, la sala que albergaba el horno (praefurnium) que calentaba el agua y el ambiente, y el combustible.
Cómo llegar
La villa romana de El Prado está situada en la partida municipal de los Cabillos, al Noroeste del casco urbano, sobre el margen izquierdo del barranco Hurón:
- En coche: Salimos de Viver por la N-234 en dirección a Teruel, tras 1´5 Km. Tomamos el camino de la derecha (justo antes del restaurante El Cristo), siguiéndolo recto llegamos a la acequia de Ojos del Prado, y tras cruzarla tomamos el camino de la derecha hasta el final.
- Ruta senderista: Salimos de Viver siguiendo la ruta indicada para llegar a los Ojos del Prado y San Miguel, señalizada como Sendero Local (verde y blanca). Tras cruzar a la acequia de los Ojos del Prado (junto a un edificio), seguimos el camino hacia la derecha hasta el final.
