El 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, ha considerado que el debate abierto sobre la celebración de los 'bous al carrer' y los festejos taurinos en la Comunitat Valenciana, tras las siete víctimas mortales registradas en lo que va del verano, es "absolutamente legítimo", ha señalado que cada ayuntamiento "tiene capacidad autónoma para decidir" sobre esta cuestión y ha defendido que la normativa valenciana que rige estos eventos es "estricta".

Puig, en una entrevista este jueves en Onda Cero, recogida por Europa Press, ha recalcado que, pese a las exigencias de la normativa, "lo primero" que han de hacer tanto los ayuntamientos como los organizadores de estos eventos es "garantizar su cumplimiento".

Sobre el debate abierto --tras las declaraciones de la vicepresidenta, portavoz y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Aitana Mas--, en relación a la celebración de estos festejos, ha señalado que son los ayuntamientos los que tienen autonomía para decidir.

En cualquier caso, el jefe del Consell ha subrayado que los 'bous' son una tradición "muy arraigada en algunos pueblos, y en otros no", por lo que ha apelado a la "corresponsabilidad" de las instituciones y de los organizadores de los festejos.

Tradición

No obstante, Puig les ha emplazado a "ser conscientes" de que deben garantizar la seguridad de las personas y el cumplimiento de las normas "más allá" de que sean "una tradición" en los pueblos en los que están "absolutamente arraigadas al imaginario colectivo".

El líder autonómico ha asegurado que, aunque cumplir la normativa "no justifica" la cifra de fallecidos --que asciende a siete este verano en la Comunitat Valenciana, "lo más importante son las personas", por lo que ha abogado por "investigar por qué se han producido estas situaciones". "De producirse estos eventos, han de estar cumpliendo las garantías que exige la norma", ha insistido.

De cualquier manera, Puig ha argumentado que el marco normativo "permite la existencia de estas fiestas" y ha considerado que el debate sobre la celebración de los 'bous' es "absolutamente legítimo" y que cada municipio "tiene capacidad autónoma para decidir" en relación a esta cuestión.

Por último, preguntado directamente por si, por ejemplo, en el caso de que fuera alcalde de Morella --su localidad natal-- mantendría los festejos taurinos en el municipio, ha afirmado que la realidad de cada pueblo es "muy diferente" puesto que la Comunitat Valenciana es "absolutamente diversa" y su riqueza reside precisamente, a su juicio, en la "diversidad".

"En algunos pueblos no hay tradición y en otros, una enorme", ha expuesto Puig, por lo que ha recalcado que los alcaldes son quienes "han de valorar y hablar con la ciudadana para garantizar la máxima seguridad".

Baldoví defiende las consultas

Por su parte, el portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, se ha mostrado este jueves a favor de "abrir un debate" sobre los 'bous al carrer' y ha apuntado que él no es partidario de "prohibiciones" sino de "preguntar a la gente".

Así ha aludido a la decisión tomada hace un tiempo y por medio de un referéndum en Sueca (Valencia), su localidad y de la que fue alcalde, en torno a los 'bous al carrer'. Ha explicado que se hizo una "consulta popular para decidir si la gente quería toros o no" y se concretó que los vecinos de esta población no querían, por lo que "se dejaron de hacer".

"Absolutamente de acuerdo con Aitana Mas en que se tiene que hablar, en que se tiene que abrir un debate" al respecto. "Cómo decir que no se ha de abrir un debate si dos días después de haberse reunido la comisión de seguridad --Comisión Consultiva de 'Bous al Carrer' de la Comunitat-- tenemos un menor de 15 años herido --al ser corneado-- y un toro muerto", ha agregado el diputado de Compromís respecto al joven herido este miércoles en los toros de Gilet (Valencia) y un astado fallecido "al salir de la plaza" en otra población.

"Cómo no tenemos que hablar. Claro que es un debate que se ha de abrir", ha insistido Joan Baldoví, aunque ha matizado que no es partidario de "prohibir nada". "Prohibiciones, estoy en contra de prohibir nada", ha aseverado, a la vez que ha reiterado la necesidad de que "se debate" y ha dicho que es "evidente" que se debe hacer. "Tenemos que hablar", ha subrayado.

Tras ello, ha mostrado su respaldo a la "autonomía municipal", para que las decisiones sobre estas cuestiones las pueda abordar cada ayuntamiento y localidad.