Abrir un negocio propio y darse de alta como autónomo resulta ahora, y pese a la pandemia, mucho más fácil que hace unos años. Y todo gracias a la batería de iniciativas que ha desplegado la Administración en la última década: capitalización del paro para montar una empresa, tarifa plana de 50 euros para los nuevos trabajadores por cuenta propia, ayudas al cese de actividad... Sin embargo, buena parte de los 41.047 autoempleados con los que cuenta Castellón tiene la sensación de que la mayor parte del tiempo trabajan para el Estado. El problema es que a partir de junio esa sensación será todavía grande. ¿La causa? La nueva subida de cuotas a la Seguridad Social que entrará en vigor el próximo día 1 y que supondrá que este colectivo pague entre tres y 12 euros más al mes.

En junio se van a aplicar las subidas fijadas por el Real Decreto Ley de 28 de diciembre de 2018, cuando se decidió el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Un alza que estaba prevista para enero y que el Gobierno retrasó hasta mitad de año gracias a la presión que ejercieron las organizaciones de autónomos, que entendían que con la que estaba cayendo no era el momento de pagar más. Pero es que, además, el incremento de las cotizaciones que llega será el segundo en pocos meses, pues en octubre de 2020 ya se elevaron las cuotas, un aumento que en ese ocasión también se retrasó por la pandemia, pues en un principio estaba fijado que entrara en vigor en enero.

En la práctica, y desde el 1 de junio, se establece un incremento del tipo de cotización del 0,8 al 0,9%, respecto al 2020, en el caso del cese de actividad, y del 1,1 al 1,3%, en cuanto a contingencias profesionales. Un alza que afecta a todos los profesionales por cuenta propia, con la única excepción de aquellos acogidos a la bonificación de la llamada tarifa plana.

En apenas una semana, todos aquellos profesionales que en la provincia cotizan por la base mínima (casi nueve de cada diez autónomos) tendrán que afrontar una cuota mensual de 289 euros mensuales, tres más que los 286,1 euros que abonan a día de hoy. En caso de optar por la base máxima, la cuota será de 1.245,45 euros mensuales (ahora es de 1.233,2).

Cada vez más caro

Más allá de esta nueva subida de las cuotas de entre tres y 12 euros mensuales, el problema de fondo es que trabajar por cuenta propia resulta cada vez más caro. Desde el 2012, la cuota mínima ha subido en 35,63 euros al mes. O lo que es lo mismo: casi 430 euros al año, lo que representa un aumento porcentual del 15%. Como contrapartida, el colectivo tiene ahora más y mejores coberturas sociales.

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La nueva subida de cuotas no gusta nada a los autónomos, pero lo que de verdad preocupa al colectivo es el cambio en el sistema de cotización que prepara el Gobierno y que podría entrar en vigor en enero del 2023. «Si la propuesta entra en vigor, trabajar como autónomo será todavía más caro de lo que ya es», apunta Juan Hernández, secretario del Gremio de Peluqueros y Esteticistas de Castellón y vicepresidente nacional de una asociación que defiende una de las actividades más perjudicadas por la reforma.

 El modelo presentado por el Gobierno contempla 13 tramos de cotización en función de los rendimientos netos. Aunque establece un periodo transitorio de nueve años desde su puesta en marcha en 2023, lo cierto es que todos aquellos que facturen más de 22.000 euros anuales verán incrementada su cuota ya este año.