Cuando aún están presentes los efectos de la grave granizada del primer fin de semana de agosto en la provincia, las inclemencias del tiempo han vuelto a causar incidencias en el campo. El secretario general de la Unió de Llauradors, Carles Peris, mencionó que en esta ocasión «hay registrados partes por el pedrisco en varios términos como Onda, Betxí, Nules, Vilavella o Burriana». Se trata de piedra mezclada con agua, que dejó marca en los cítricos, cuando quedan pocas semanas para que comience la recolección. También cayó con fuerza el pedrisco en puntos del interior norte, como Vilafranca, aunque no constan daños de gravedad.
Por parte de AVA-Asaja, destacaron los daños en las comarcas de la Plana Alta y l’Alcalatén. Las precipitaciones «causaron daños desiguales y localizados en la agricultura, habrá que esperar a ver los efectos de la tormenta durante los próximos días para poder valorar las pérdidas económicas generadas por la piedra», señaló el presidente de la organización agraria, Cristóbal Aguado. Asimismo, solicita a Agroseguro que agilice al máximo las peritaciones.
Por otro lado, la Generalitat activó ayer viernes vigilancia aérea por los numerosos rayos caídos en Els Ports o el Mijares, ante el riesgo de incendios forestales.
Previsión
El mes de agosto ha estado marcado por el fuerte pedrisco, al que le siguió una fuerte ola de calor. Tras los chubascos del jueves, las previsiones apuntan a tiempo estable, con pocas nubes y temperaturas que rondarán este fin de semana los 20 grados de mínima y 28 de máxima en Castelló. En Vilafranca los termómetros cayeron el jueves hasta los 12,3 grados, mientras que las mínimas de los próximos días rondarán los 14 grados, con máximas de 27.
La expansión del ‘cotonet’ ya afecta a otros cultivos
La gran expansión de la plaga del cotonet en los últimos años, con la comarca de la Plana Baixa como más afectada, no solo perjudica a la producción de cítricos, sino que también alcanza a otras frutas de la Comunitat. La organización AVA-Asaja detalla los estragos que causa en el caqui, y coincide con el análisis de la Asociación Española del Kaki, que teme un descenso de producción en la próxima campaña de al menos entre un 20 y un 25% de la cosecha en España.
Además, AVA menciona que este descenso de la cosecha es más acusado en la Comunitat, que sufre ya mermas del 50% en muchos campos. «El daño que hasta el momento no lo han hecho las tormentas en este fruto lo harán estas plagas. El nivel de afección en el cultivo del caqui es inasumible para sus productores, que experimentan una gran dificultad para controlar la expansión», comentó el presidente, Cristóbal Aguado.
