Castellón necesita intensificar todos los medios a su alcance en tratamientos antimosquitos en los próximos días para evitar su eclosión justo en Semana Santa. Las fuertes precipitaciones registradas en las últimas semanas han caído de forma providencial muy cerca en el calendario de la Pascua y conllevan un contexto crítico. «Lluvias fuertes y temperaturas en ascenso son la tormenta perfecta para que las larvas que ya hemos detectado en muchas marjales del litoral de Castellón, desde Almenara al Prat de Cabanes-Torreblanca, se reproduzcan y generen mosquitos adultos, de los que pican. Si no se refuerzan los tratamientos biológicos y en los próximos 7 días se mantienen esas láminas de agua y sigue subiendo el termómetro, tendremos un problema a corto plazo y la ciudadanía lo notará en Semana Santa», explicó Rubén Bueno, entomólogo y al frente de la empresa de control de plagas Lokímica.
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La Conselleria de Sanitat ya ha detectado larvas de mosquito tigre en 87 municipios de Castellón, en seis de cada diez, el 64%; y ha recibido peticiones de 13 ayuntamientos (Almenara, Benicàssim, Burriana, Cabanes, Castelló de la Plana, La Llosa, Moncofa, Nules, Orpesa, Peñíscola, Torreblanca, Xilxes y Almassora) para que se les autorice a realizar tratamientos aéreos. «El plan inicial se aprobará en los próximos días», indicaron desde Sanitat. El catedrático en Entomología y Control de Plagas de la Universitat de València, Ricardo Jiménez, ya ha realizado prospecciones sobre el terreno previas a los permisos, pues «con el agua que ha caído, la marjal no traga más, y contiene los huevos de la anterior temporada, que ya están sobre el terreno». El plan de vuelo aéreo necesita de autorización al ser los marjales un hábitat protegido por la UE, «pero atajar el mosquito es cuestión de salud». Y es que las intensas precipitaciones de marzo --con récord en Espadà-- han llenado marjales y en algunos puntos la profundidad es tal que no se puede efectuar tratamiento terrestre ni acceder con vehículos anfibios. La zona a intervenir en el humedal «debe delimitarse» y concentrar «una superficie amplia», matiza.
Un 2022 que pude ser "exponencial"
Evitar ahora este pico supone evitar que el año sea peor. «Los episodios de precipitación brusca al principio de la primavera siempre condicionan los programas de control de mosquitos. Y más en el Mediterráneo, con temperaturas suaves y buenas para su desarrollo», valoró Bueno. «De cara al 2022, ahora se dan los condicionantes para que el mosquito tenga el primer pico de población y todo lo que no se controle ahora , supondrán mosquitos picando y más huevos, y la siguiente generación de insectos será más costosa de eliminar. Es exponencial. Tener un verano normal depende de lo que hagamos ahora. Si vuelve a llover, habrá que reiniciar la prevención», remarcó. «La franja montañosa de Castellón es calcárea y filtra mucha agua que aflora en la marjaleria litoral. Al norte, al Prat, llega del Penyagolosa; y al sur, de Espadà», remarcó. Con todo, una larva en verano se reproduce en menos de una semana en el agua; y ahora va algo más lento, entre 7 y 11 días según la especie, temperaturas, etc. Pero a más de 11 grados ya tiene suficiente», detalló.
Aviso a los particulares en sus segundas residencias: del bebedero al plato de la maceta
La colaboración de los particulares es fundamental para evitar el avance de una plaga que aún se está a tiempo de controlar. Rubén Bueno, de Lokímica, aconseja que en viviendas o segundas residencias ahora cerradas, en la playa o en el pueblo, se revisen objetos de jardines y terrazas. No solo piscinas sino en bebederos de animales o el plato de una maceta. Se aconseja vaciar y dejarlos boca abajo, pues «el mosquito tigre se reproduce con poca agua». «Y en huertos, es importante sacar el agua estancada que pueda haber en bidones o cubos».
El mapa de los mosquitos. Consulta aquí la web oficial con el listado de municipios donde Sanitat ha detectado ya las larvas de mosquito tigre.