Marie Claire inicia nueva etapa tras la baja voluntaria de un centenar de trabajadores

Nueva etapa en Marie Claire. Cuando se cumple un año desde que el grupo empresarial B2TEX asumiera el control de la centenaria textil con sede en Vilafranca, la compañía pone en marcha su nuevo plan estratégico con dos ejes fundamentales: multiplicar las ventas en el exterior y potenciar el canal on line. Un cambio de rumbo que llega tras unos meses muy duros que han obligado a la firma a llevar a cabo un intenso proceso de transformación para hacer frente a problemas como el alza sin precedentes de la electricidad y el gas, la crisis logística o la escasez de materias primas.

La textil de Els Ports, uno de los buques insignia de la industria del interior y que ha recibido ayudas millonarias por parte del Consell a cambio de mantener la producción en la comarca, inaugura etapa y lo hace con menos trabajadores. En las últimas semanas, y según ha podido saber Mediterráneo, cerca de un centenar de profesionales han salido de la empresa de manera voluntaria, con lo que la plantilla se ha quedado en torno a los 300 trabajadores (unos 225 en la fábrica de Vilafranca y otros 75 entre las oficinas de Castelló y València). La cifra contrasta con la registrada en la década de los años ochenta, cuando la emblemática compañía empleaba a casi un millar de trabajadores.

La dirección de Marie Claire puso en marcha a principios del pasado febrero un plan de choque para intentar amortiguar los costes de la electricidad y el gas. La medida de más impacto fue parar la producción todos los viernes, concentrando la actividad de sus trabajadores de lunes a jueves (en jornadas de diez horas) y respetando los salarios. Un cambio en las condiciones laborales que ha provocado que cerca de cien empleados causen baja de manera voluntaria en la empresa. La mayoría de los que se han ido tienen entre 58 y 60 años (les faltaba poco tiempo para la jubilación), han recibido una indemnización y cobrarán la prestación por desempleo.

Cierre de la planta de Borriol

La salida voluntaria de estos trabajadores se une a aquellos que causaron baja de la empresa a finales del año pasado, cuando Marie Claire cerró su centro logístico de Borriol, y en el que trabajaban otro centenar de personas, para concentrar su actividad en el centro de producción de Vilafranca.

Con una plantilla más escueta, la compañía pone ahora en marcha su plan estratégico y lo hace después de ejecutar un plan de viabilidad para conseguir, según la dirección de Marie Claire, una firma «más dinámica y flexible, capaz de dar respuesta a un entorno complicado» . Y es que además del cierre del centro de Borriol, la empresa ha optimizado los recursos productivos, ha reducido los costes de fabricación y ha introducido mejoras en la marca.