Continúan las quejas en el Hospital General de Castellón a cuenta del calor. Aunque desde la Conselleria de Sanitat afirman que el aire acondicionado funciona y que el servicio de mantenimiento revisó ayer mismo los conductos, este periódico ha recibido nuevas quejas de pacientes de la cuarta planta del centro, que siguen llevándose al hospital ventiladores de sus casas.

«Estamos en el General con una persona mayor desde el pasado sábado. El calor que hace en la habitación es muy difícil de soportar. Hemos cogido un aparato de aire de casa y un termómetro para ver la temperatura que hace en la habitación. Hoy es de más de 28 grados, pero ha llegado a marcar 31ºC», sostiene el familiar de una enferma en conversaciones con este periódico.

Esta familiar acudió ayer al servicio de atención al paciente para quejarse de la situación. «En la oficina también tenían ventiladores y las enfermeras también nos dicen que usan porque hace mucho calor. En la planta donde estamos hay gente mayor, que lleva pañal o que tiene llagas por el cuerpo y si a eso le sumas que el aire no vaya...», explicó a este rotativo.

Mediterráneo ya se hizo eco días atrás del testimonio de una familia, que aseguraba no poder dormir por las noches en la quinta planta por el «asfixiante» calor. Ayer, preguntados por este diario, insistieron en que la situación no ha cambiado. «Aún no va el aire. En otras zonas se ve que sí que funciona, pero en nuestra parte, nada», cuenta el hijo de un paciente de avanzada edad que ya denunció la situación durante la reciente ola de calor extremo. «Estamos empapados en sudor», sostuvo entonces, mientras intentaban aliviar el calor por medio de abanicos, ventiladores o también pulverizadores de agua. 

Fueron las propias enfermeras del Hospital General quienes, según los ingresados, aconsejaron a las familias llevar al hospital algún aparato de aire que pudiera aliviar su estancia.

Los técnicos de la Conselleria de Sanitat consiguieron el pasado día 16 reparar la avería que afectaba al aire acondicionado, como recogió este periódico, aunque los familiares de los enfermos insisten en que la mejora no se nota y el calor en las habitaciones sigue siendo «insoportable».  

Desde el departamento de Miguel Mínguez se muestran sorprendidos por las nuevas quejas y aseguran que las habitaciones en las que el aire no funcionaba y no se pudo solventar el problema se han cerrado y que no hay pacientes en ellas. Asimismo, aconsejan a los posibles afectados que hablen con el servicio de atención al paciente y, de ser necesario, soliciten un cambio de habitación.

En este sentido, las familias de los afectados advierten que tramitarán sus respectivas quejas ante la administración.