Castellón ya revisa condenas sexuales antiguas --algunas de ellas de hace casi una década-- tras el hueco legal que se ha abierto para las defensas de sentenciados por delitos sexuales tras la aprobación de la ley del solo sí es sí. 

Si Mediterráneo advertía ayer de que la reforma legislativa iba a provocar un aluvión de solicitudes por parte de letrados de la provincia, en este momento se ha conocido que algunos de los casos más graves --y mediáticos-- de los últimos tiempos ya han llamado a las puertas de la Audiencia Provincial de Castellón en busca de una rebaja de las penas impuestas en casos de violaciones y abusos. Entre ellas, están la condena a un policía local de Burriana por abusos a nueve menores en riesgo de exclusión --su detención data del 2014 y la sentencia, del 2016-- o la violación a una menor de Burriana, que fue asaltada en la calle y retenida en una vivienda durante la Nochevieja del 2018 al 2019.

Aunque jueces y fiscales de Castellón consultados inciden en que tramitar la solicitud de revisión no implica lograr una rebaja o la puesta en libertad del penado, lo cierto es que existe inquietud y, sobre todo, crítica a la aprobación de la nueva norma por parte del Gobierno sin el beneplácito de los expertos. Y es que cabe recordar que el Consejo General del Poder Judicial emitió un duro informe sobre el proyecto de ley y advirtió de los problemas que plantearía.

Críticos con la reforma son también los abogados de Castellón, cuya opinión ha pulsado este diario. «Han promulgado una ley sin tener en cuenta las consecuencias que ya son un hecho y en contra del informe del Consejo. Los jueces están aplicando correctamente las leyes en virtud del principio de legalidad, lo que incluye la retroactividad y, por supuesto, esto va a afectar a la jurisprudencia de Castellón», recuerda la letrada Iman Aarim.

El TSJ confirmó que la Audiencia estudia ya cuatro condenas, un número que irá a más teniendo en cuenta la incorporación diaria de nuevas causas.

Casos que ya han solicitado la revisión

'Mediterráneo' informó sobre la detención del agente municipal. MEDITERRÁNEO

El policía condenado a 61 años por pederastia 

José Antonio Martín Moya, el policía local de Burriana acusado de abusar sexualmente de menores de edad bajo presiones, fue sentenciado a 61 años y seis meses de cárcel en marzo del 2016. La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Castellón lo condenó por varios delitos de prostitución y abuso sexual a nueve adolescentes, todos varones y de 14 a 16 años.

Martín Moya se aprovechaba su condición de agente para contactar con adolescentes en situación económica precaria y con un historial delictivo. A estos les prometía mediar en los asuntos policiales o judiciales que tenían pendientes y les entregaba dinero, concretamente, cantidades que oscilaban entre los 20 y 50 euros, como ya adelantó en exclusiva este diario.

El policía les amenazaba con entorpecer sus causas judiciales, para convencerlos de mantener relaciones sexuales con él. Los chicos, tal y como detalla la sentencia, no oponían resistencia física, ante el temor a represalias.

El tribunal destacó la «importante» diferencia de edad entre el procesado, que tiene ahora 46 años, y los menores. Además, en el documento se hizo hincapié en las carencias existentes en la personalidad de las víctimas, procedentes de familias desestructuradas, circunstancias ambas «que los hace más vulnerables a la sugestión».

Las protestas por la violación múltiple de Burriana, en portada en 2019. MEDITERRÁNEO

Los autores de la violación múltiple de Burriana

Uno de los casos que más revuelo social ha generado en la provincia en los últimos años fue la violación y rapto a una menor de 17 años en la madrugada de Año Nuevo del 2019. La víctima regresaba a su domicilio de Burriana tras pasar la noche de fiesta en la carpa municipal, cduando fue abordada por la espalda por un varón que primero la violó en la calle y, después, la condujo hasta su casa. No solo volvió a agredirla sexualmente él, sino que al ataque sexual se sumó un compañero de piso.

La violación múltiple acabó con la condena a 23 y 21 años de prisión de los dos jóvenes que la agredieron sexualmente de forma continuada durante seis horas. Los condenados tenían 19 y 21 años y trabajaban como temporeros de la naranja.

La detención de los autores de la violación pocas horas después del suceso provocó que cientos de personas salieran a las calles de Burriana para manifestarse contra el ataque a la menor. El Ayuntamiento convocó una protesta a la que acudieron 2.000 vecinos. Después, muchos de los asistentes trasladaron su malestar al cuartel de la Guardia Civil, donde permanecían los dos detenidos y donde se vivieron momentos de tensión. 

La muchedumbre, enfurecida por el suceso, gritó consignas como ¡Si tocan a una, tocan a todas!. No hubo incidentes.

El seductor de un niño por internet

Once años de prisión por un delito de abuso sexual continuado y otro de contacto telemático con un menor con fines sexuales. Es la pena que le impuso la Audiencia en el 2020 a un hombre de 40 años que en el 2016 habló por internet con un niño de solo 12 y acabó quedando con él en persona para mantener relaciones íntimas. Víctima y condenado se conocieron a raíz de un anuncio que publicó el procesado en una página de contactos para adultos. Tras intercambiar mensajes, se vieron en el domicilio del menor. Pese a que conocía la edad del adolescente --es delito tener sexo con una persona de tan corta edad-- y a que este le pidió que parara durante la relación íntima, el adulto no lo hizo.

La agresión sexual de Vilafamés

El caso de un vecino de Vilafamés que tenía 18 años cuando una vecina, de 17, lo denunció por relaciones sexuales forzosas dividió a la población en 2019. Y es que en la localidad se recogieron cerca de 2.000 firmas en apoyo al procesado tras conocerse que la Audiencia Provincial lo había sentenciado a seis años de prisión. Los forenses no hallaron lesiones en el reconocimiento de la chica, pero la sentencia incidió en que esto era «irrelevante».

Los padres del joven llevaron el caso ante el TSJCV y después ante el Supremo, pero no consiguieron una rebaja. Según ha podido saber este diario, tras la reforma del solo sí es sí ya han presentado la correspondiente solicitud de revisión.