El desempleo entre los discapacitados sube un 5% en Castellón

Casi 2.000 parados pertenecen a este colectivo y el Gobierno elimina el despido automático

Varios jóvenes con discapacidad realizan un taller para mejorar su empleabilidad.

Varios jóvenes con discapacidad realizan un taller para mejorar su empleabilidad. / Mediterraneo

Elena Aguilar

Elena Aguilar

Encontrar trabajo no es fácil. Hay que enviar currículos, buscar en internet, llamar a muchas puertas. Y si conseguir una respuesta afirmativa es difícil para la mayoría de parados, para los que tienen una discapacidad la cosa se complica más. En Castellón 1.9o5 personas en situación de desempleo tienen alguna discapacidad, una cifra que durante el último año, y tras varios ejercicios de mejora, ha vuelto a aumentar. En 2023 lo hizo un 5%, mientras que el paro entre la población general creció un 1,09%.

Para acelerar que las personas con discapacidad puedan acceder a un trabajo incluso si se les reconoce la incapacidad con posterioridad a su incorporación laboral, el Gobierno acaba de aprobar la eliminación del despido automático por gran invalidez o incapacidad permanente. Un cambio que reconoce, además, el derecho de los empleados que estén en estas situaciones a pedir que las empresas que adapten su puesto de trabajo.

En la práctica, ese cambio que ya ha salido aprobado por el Consejo de Ministros implica que la empresa no podrá despedir a un profesional con gran invalidez o incapacidad permanente total o absoluta si este manifiesta su voluntad de seguir en la compañía y solicita un cambio a otro puesto de trabajo que se adapte a sus nuevas circunstancias. «Lo que se persigue es que el reconocimiento de una incapacidad no suponga el punto y final laboral de esta persona», explican desde el Ministerio de Trabajo y Economía Social.

Leve descenso

Y ¿cuántas personas con discapacidad hay trabajando en Castellón? En estos momentos y, según los últimos datos que maneja el Servicio Público de Empleo, los afiliados son 3.571, una cifra que en el último año ha disminuido ligeramente, dado que al cierre del 2022 eran 3.583 en la provincia.

El último ejercicio no ha sido bueno para el empleo de las personas de este colectivo y, además, si se compara la cifra de cotizantes a la Seguridad Social con la de discapacitados en edad de trabajar, la conclusión todavía es más pesimista: solo trabajan poco más de 3.500 de los 21.738 que tienen entre 16 y 65 años. «De cada 10 personas con discapacidad, 7 no tienen empleo», lamentan desde el colectivo de Castellón. Y entre las causas destacan la falta de puestos adaptados en muchas empresas o los prejuicios sociales que, pese a los avances, aún existen.

Los datos evidencian que todavía queda mucho por hacer (el grueso de los profesionales con discapacidad trabajan en el sector servicios) y el colectivo insiste en la necesidad de seguir avanzando en políticas que impulsen el empleo de estas personas.