La respuesta no se hizo esperar. El Partido Popular calificó ayer de "intolerable, escándalo, desvergüenza, discriminación y descontrol" la declaración que realizó el conseller de Agricultura de Cataluña, Antoni Siurana, en la que anunció que su departamento ha realizado un proyecto de regadío del canal Xerta-Sénia para los comarcas del Baix Ebre y el Montsi (Tarragona), reduciendo en los últimos kilómetros el canal a una tubería, lo que cerraría las puertas a cualquier trasvase a la Comunidad Valenciana y, en concreto, a Castellón, según apuntó Siurana.

A este respecto, el conseller de Infraestructuras, José Ramón García Antón, declaró que este proyecto "supondrá un trato discriminatorio a la Comunidad Valenciana en caso de que el Ministerio de Medio Ambiente dé el visto bueno a esta propuesta", e instó al Gobierno central a explicar si este trasvase forma parte de su nueva política del agua. "No tendría sentido que ahora el trasvase fuera válido", continuó tras recordar que esta situación demuestra que "lamentablemente", en España no existe una política de Estado en materia de agua. Por este motivo, para García Antón, lo que realmente existe ahora es una política de agua basada en visiones particulares.

El secretario ejecutivo de Política Económica y Empleo del PPCV, Alfonso Ferrada, también criticó la actitud de los catalanes y declaró que las excusas del tripartito contra el trasvase del Ebro "tan sólo eran burdas mentiras". Afirmó, también, que "con esta nueva agresión a la Comunidad Valenciana y a Castellón lo único que demuestra, una vez más, es su insolidaridad con nuestra autonomía".

"Las excusas medioambientales que el tripartito y el PSOE defendieron en sus campañas electorales o eran falsas o sólo eran excusas contra nuestro territorio", prosiguió. Por último, Ferrada subrayó que al secretario general del PSPV, Joan Ignasi Pla, se le presenta de nuevo "la oportunidad de demostrar que su formación defiende los intereses de nuestra Comunidad".

PROPOSICIÓN NO DE LEY También mostró ayer su malestar la portavoz del Plan Hidrológico Nacional del Grupo Popular, María Ángeles Ramón-Llin, y anunció que el PP presentará una proposición no de Ley de el Congreso en el que instará al Gobierno de Rodríguez Zapatero a que dicho trasvase se extienda también a Castellón "como principio de un trasvase más amplio que contemple toda la cuenca mediterráneo".

El vicepresidente de la Diputación Vicent Aparici consideró que las declaraciones de Siurana eran "una inocentada porque, de ser verdad, es una barbaridad. Este proyecto vulnera el propio Plan de Agua del Gobierno ya que es una infraestructura no prevista".