Los costes de fabricación de la industria azulejera marroquí triplican los del azulejo español, principalmente por el alto coste energético de dicho país. Mientras fabricar en Marruecos un metro cuadrado de revestimiento o pavimento se acerca los 60 dirhams --cerca de 6 euros--, en España se sitúa en torno a los 20 dirhams --casi 2 euros--, es decir, una tercera parte, según la oficina económica de la Embajada de España en Rabat.

Este diferencial competitivo ha sido el que ha impulsado a la industria alahuí a protegerse de los productos españoles, con la excusa de la invasión de producto chino. Más aún, cuando el presidente de la patronal azulejera, que agrupa a firmas como Unión Cerame, Facemag, Superceram, Cocema, Grocer y Arcoceram, es también el máximo responsable de la Confederación General de Empresas de Marruecos. Esta circunstancia ha convertido al sector azulejero marroquí en un grupo de presión de peso en su país.

La diferencia de gastos de producción se atribuye a los altos precios de la energía y la electricidad. En el sector alauí, el propano tiene especial importancia, pero su suministrador ha sido históricamente Argelia que, por sus tensas relaciones con Marruecos, impone unos precios más elevados que a otros países.

La industria del país africano, cuyas primeras firmas empezaron a operar en los años 70, en su conjunto, suma a cerca de 50 empresas, que emplean a casi 6.000 trabajadores. Sin embargo, el coste de personal también es mucho más elevado que en España, puesto que empresas que fabrican 20.000 m con la misma tecnología, necesitan 600 personas para trabajar en Marruecos, mientras que en España es suficiente con 80 operarios.

Pese a unos costes más elevados que todos sus competidores --Egipto, Túnez, Turquía, Italia y España-- y la invasión de producto chino a precios ínfimos, la producción alauí ha pasado de 34.967.000 m en el 2001 a 41.481.000 m en el 2004, con crecimientos del 5% hasta el 2003 y del 7,7% en el 2004.