Desde su cargo de segunda jefatura de la embajada de España en Dar es Salaam --algo así como el segundo de a bordo en la representación del Estado en Tanzania--, el burrianense Emilio Pin Godos ve con optimismo el futuro de las relaciones entre este casi desconocido país y su tierra natal, Castellón.
De hecho, Pin indica que Tanzania, país pobre pero políticamente estable y tranquilo, está viviendo en los últimos años "un ligero despegue económico" y, aunque reconoce que "es un mercado desconocido", advierte a las empresas de la provincia de la oportunidad de negocio que puede suponer Tanzania en un futuro no demasiado lejano. "Sería importante una estrategia empresarial que se fijase en el mercado tanzano, que, a medio plazo, puede tener una cierta capacidad de negocio", matiza Pin.
De hecho, el segundo jefe de la embajada explica "cada vez hay un mayor interés por lo español" en Tanzania; "existe una cierta simpatía", agrega. Simpatía que, en los últimos tiempos, parece ser recíproca, ya que, tal como indica Pin, "ha crecido el interés del turismo español" por este país que, al exotismo de los paisajes, añade una situación estable.
Una representación que, tal como explicó el diplomático burrianense, se justifica "por la protección consular". Es decir, la asistencia a todos los españoles en situaciones difíciles. "Hacer frente a estas situaciones es duro", explica Pin, "pero es la razón de ser de nuestro trabajo". Un trabajo que para Pin se sustenta principalmente en la "vocación de servicio del cuerpo diplomático".
