El AVE de Valencia a Castellón sólo alcanzará puntualmente el tope de los 350 kilómetros por hora en pequeños tramos y la velocidad media será de unos 200 kilómetros por hora. La duración del trayecto se estima en 20 minutos, frente a los 45 que tarda ahora el Euromed.
El Ministerio de Medio Ambiente anunció el viernes la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del tramo Valencia-Castellón y señaló que se decanta por la opción que discurre más pegada a la línea de costa. Una vez la DIA se publique en el BOE, el proyecto quedará desbloqueado y podrá seguir su trámite administrativo.
El estudio informativo del AVE Madrid-Comunitat Valenciana se redactó en abril del 2002 y ha permanecido durante casi cuatro años paralizado. Dicho estudio destaca las "especiales" características del tramo entre Valencia y Castellón, ya que coexisten "importantes valores ambientales" --como son la Marjal de Almenara y la desembocadura del Millars-- con "fuertes tensiones de crecimiento" urbanístico. Estas circunstancias condicionan la velocidad máxima del trayecto y sólo en momentos puntuales se circulará a 350 kilómetros por hora. Dentro de la provincia de Castellón, este tope se alcanzará diez o doce kilómetros antes de llegar a la capital y luego se reducirá para entrar en la estación.
El AVE reducirá de forma sustancial el mejor tiempo de recorrido actual entre Valencia y Castellón, que es de 45 minutos y lo realiza el Euromed. Las estimaciones del Ministerio de Fomento señalan que el trayecto tendrá una duración de 20 minutos. El presupuesto de la nueva plataforma ronda los 300 millones.
La llegada de la alta velocidad obligará a reformar la estación de Castellón para reordenar los tráficos. La configuración actual de seis vías en ancho ibérico se reemplazará por una nueva en la que las tres vías del lado este se cambiarán a ancho internacional para el AVE. Las otras tres vías, las del lado oeste, se mantendrán en ancho ibérico para seguir dando servicio a los trenes de cercanías y mercancías.
INTERROGANTES La DIA debe aclarar si habrá una variante exterior para mercancías que circunvale la ciudad de Castellón o si todo el tráfico discurrirá por el túnel. También ha de fijar el emplazamiento de la nueva estación de mercancías de Vila-real y el trazado de la variante de este municipio en ancho ibérico, que incluye la construcción de una estación de cercanías.
