El concejal de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Castellón, Miquel Soler, ofreció ayer a los propietarios de los locales de ocio del entorno de la calle Lagasca y adyacentes la posibilidad de que puedan disponer de limitadores de sonido en sus negocios, a fin de paliar los posibles problemas que se puedan originar en los establecimientos.

Además, en el transcurso de la reunión mantenida con representantes de los vecinos, agentes de la Policía Local informaron de que en los dos últimos fines de semana se han practicado 42 inspecciones a locales, con nueve denuncias y tres notificaciones. La actuación policial también se ha centrado en el control del tráfico, con 24 denuncias (seis por alcoholemia), con la retirada de dos vehículos, y una multa por orinar en la calle.