El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, inaugura hoy el centro penitenciario Castellón II, un núcleo urbano autosuficiente que, con el tiempo, igualará e, incluso, superará en población a la propia Albocàsser, en cuyo término se ubica. Frente a los 1.318 habitantes empadronados en la localidad del Maestrat, las dependencias carcelarias tendrán 1.008 celdas, 206 complementarias y más de medio millar de trabajadores, entre funcionarios y personal laboral.

Han tenido que pasar cinco años y medio para ver inauguradas las instalaciones, aprobadas por el Consejo de Ministros el 24 de enero del 2003. Las obras se iniciaron en diciembre del 2005, en una parcela de 418.727 m y con una inversión de 93,4 millones de euros. Según fuentes sindicales, su apertura se hará por fases. Así, se estrena sin todos los funcionarios, ya que la mayoría de los destinados no se incorporarán hasta septiembre. Se espera que los presos lleguen a partir de entonces y que, hasta final de año, se ocupe al 50%. El sindicato Acaip vio "imposible" que funcione al cien por cien antes de que haya transcurrido un año.

Fuentes de la sección sindical de CSI-CSIF de Prisiones indicaron que la nueva penitenciaría supondrá "un balón de oxígeno", pues a partir de septiembre permitirá descongestionar la situación de cárceles como Castellón. Sin embargo, advirtieron de que será un alivio temporal, para seis meses o un año, debido al aumento de población carcelaria que se sufre en el Estado.

CSI-CSIF demandó acelerar el plan de infraestructuras penitenciarias, ya que los penales se hallan masificados. Citaron que prisiones tipo similares a la de Albocàsser, concebidas con 1.008 plazas, albergan entre 1.700 y 1.800 internos. De hecho, cada celda está preparada para albergar dos camas. Asimismo, explicaron que la población carcelaria aumenta en España del orden de 16 a 18 presos por día, lo que equivale a más de 4.000 más al año, por lo que se necesitarían dos nuevas cárceles anualmente.

Otro de los aspectos que queda por definir es la implantación del cuartel de la Guardia Civil. El alcalde, Antonio Querol, recordó que el consistorio se halla en fase de expropiación de las dos parcelas que faltan para completar la cesión del suelo a la Dirección General de la Guardia Civil.

El alcalde reconoció que la implantación de la cárcel ha supuesto un auge de la actividad constructiva y un impulso al alquiler de inmuebles, al menos durante la ejecución del penal. Sin embargo, a su juicio, los funcionarios no se muestran muy interesados en adquirir viviendas para residir en el municipio. El alcalde apuntó que estos parecen decantarse por municipios costeros como Benicàssim.

CONTRAPARTIDAS También quedan pendientes las mejoras prometidas al municipio, como un colegio y un instituto, y la mejora de las comunicaciones, con las actuaciones anunciadas en la CV-15 y la CV-129 en su conexión con la CV-10.