En el capítulo de las soluciones posibles para prevenir la obesidad y resolver el problema cuando se presenta, el equipo de dietistas del Hospital Provincial de Castellón señala que, en relación a la dieta, hay que evaluar de manera individual a cada niño y realizar una reducción calórica que garantice el crecimiento, con lo que hay que disminuir de forma adecuada las calorías y principios inmediatos siguiendo en todo momento una alimentación sana y equilibrada.

Añaden que es conveniente realizar entre cinco y seis comidas al día, sin olvidar la importancia que debe tener el desayuno, que ha de incluir diariamente lácteos, cereales y frutas; reducir el consumo de bollería, potenciar el bocadillo para almuerzo y merienda; tomar cinco raciones al día de frutas y verduras, y aumentar la actividad física fuera del ámbito escolar. Hay que evitar la restricción de alimentos y reducir las cantidades. Son niños y las raciones no deben de ser como las de los adultos. Si comen en el colegio, deben comer lo mismo que los demás, para no sentirse diferentes, y controlar en casa el resto de ingestas.

Una buena herramienta para los padres es el manual La alimentación de tus niños, editado por el Ministerio de Sanidad, así como la Conselleria de Sanidad, que cuenta con una guía de menús saludables para los comedores escolares, que está a disposición de los colegios.