Los niños con déficit de sueño tienen un comportamiento más impulsivo y agresivo, como los menores hiperactivos, algo que afecta también a sus facultades para el aprendizaje, e incluso a su sistema inmunológico y a su crecimiento a largo plazo. Entre las medidas para mejorar este panorama, el doctor Pin propuso medidas como retrasar una hora el inicio de las clases para que puedan dormir más.
A medida que aumenta su edad se incrementa el porcentaje de niños castellonenses que decide por sí mismo su hora de acostarse, de forma que el 66,7% de los mayores de 12 se va a la cama cuando quiere.
