Han llegado a la vez que su nuevo entrenador, David Amaral. Sobre el papel aterrizan como refuerzos, con la siempre complicada papeleta de hacer olvidar a aquellos futbolistas cuyas vacantes vienen a cubrir. César Martín, Ximo Enguix, Jonatan Valle, Guzmán Casaseca y Javier Lledó están llamados a ser la nueva guardia, jugadores que han recalado en la entidad con el aval del nuevo técnico y que deben ser referencia de un equipo que ha quedado un tanto huérfano de líderes tras la marcha de los antiguos pesos pesados del vestuario.
Desde el primer día de trabajo, los nuevos se han marcado el reto de integrarse cuanto antes al grupo, familiarizarse con sus nuevos compañeros y, sobre todo, las ganas con las que están afrontando los entrenamientos están sirviendo para que aumente la intensidad en todas las sesiones.
Los más veteranos de la plantilla, jugadores como Pedro Hernández o Juan Antonio Zamora, están maravillados con la actitud de los recién llegados. La plantilla orellut se concentra esta semana en las instalaciones de La Calderona, en Bétera, y el grueso del grupo coincide en afirmar que los fichajes están pisando el acelerador desde el primer día. "Son unas máquinas", se le escuchaba susurrar a Pedro sobre los novatos.
El propio defensa alaba "la buena predisposición al trabajo, su implicación y principalmente la humildad con la que han llegado". Y eso que hay jugadores experimentados como Enguix, Lledó, Jonatan e incluso un campeón de Liga --con el Depor-- como César. "Tienen todos muy buena pinta. Al resto nos tocará apretar", añade el lateral diestro.
Zamora corrobora la opinión de Pedro. "Se han integrado de forma rápida y participan en el día a día. Además, van a tope en cada entrenamiento", remarca.
Incluso en el reparto de habitaciones en La Calderona denota que los nuevos se están mezclando rápidamente con el resto, una circunstancia fundamental para cohesionar rápidamente un vestuario en el que este año habrán, como mínimo, ocho caras nuevas.
A excepción de Guzmán y Enguix, que comparten habitación, el resto ha preferido introducirse con nuevos compañeros, una situación aplaudida por el resto del grupo. De hecho, José Tabares es el tándem de César Martín; Pol comparte techo con su excompañero en el Ceuta Javier Lledó y el escudero de Jonatan Valle es Sergio Mantecón.
Los nuevos hombres de Amaral han irrumpido con fuerza en el vestuario del Castellón, puesto que nadie quiere quedarse atrás. Este año, ser titular en el conjunto albinegro va a estar muy caro y todos los protagonistas, veteranos y noveles, lo saben.
