La nueva patrullera de altura de la Guardia Civil Río Segre, la más moderna de España, ha sido fabricada en Benicarló y permanecerá amarrada en Valencia, pero prestará sus servicios en las tres provincias de la Comunitat. El delegado del Gobierno, Ricardo Peralta, presentó ayer la embarcación, construida por el astillero Oremar de Benicarló, con una inversión de cuatro millones de euros. Peralta destacó que “el Gobierno de España no solo trabaja para la Comunitat, sino en la Comunitat y con empresarios valencianos”. La nueva nave, dijo, “mejorará la seguridad del Mediterráneo y de nuestras costas”. Recordó que “a través de esta embarcación contaremos con mejores medios para interceptar actuaciones ilícitas”. Se usará para socorrer en alta mar a personas en dificultades, luchar contra la inmigración ilegal, vigilar las aguas territoriales, realizar tareas de resguardo fiscal o de lucha contra el narcotráfico en general. H
