Castellón cuenta con una importante bolsa de vivienda vacacional que urge rehabilitar y, de hecho, los aparejadores han constatado en lo que va de este 2015 un boom de expedientes de obra para reformar apartamentos de la costa, desde Benicàssim a Orpesa o Peñíscola. Estos se unen a la puesta a punto de casas de los pueblos de interior, que ya se venían acometiendo, y que centraba hasta ahora este mercado de la renovación inmobiliaria.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) la provincia cuenta con 51.818 viviendas secundarias, de veraneo, que se construyeron antes de 1980, de más de 35 años de antigüedad.

El presidente del Colegio de Arquitectos Técnicos de Castellón, Alfredo Sanz, explicó que “en la costa, por ejemplo, en Benicàssim por el paso del tiempo, la agresividad del ambiente marino y la deficiente conservación de inmuebles (de los años 60 y 70) está motivando actualmente intervenciones de rehabilitación. Si hubiera una ordenanza que lo reglara sería todo más fluido”.

Y añadió Sanz que “se está actuando sobre todo en viviendas de verano a nivel estructural, no sé si también en eficiencia energética”. Princicàssim, Quijote, Tramontana, Elena o Aries son conocidas fincas de apartamentos en las que se prevén o ya se han acometido obras.

La gerente del Colegio de Aparejadores, María Luisa Pobo, explicó que “muchas de estas fincas de playa utilizaron estructura metálica que se corroe por la erosión de la proximidad del mar. El deterioro de forjados y terrazas es la primera señala. Se están cambiando muchas barandillas metálicas de balcones por otras de acero inoxidable. Y en casas rurales, se retiran las cubiertas de madera por su deterioro”.

AEROPUERTO // Para Sanz, “Castellón tiene un potencial tremendo para la rehabilitación de segunda residencia. Si se reforma hay más opciones de venta para los turistas de otros países que lleguen por el aeropuerto. Primero vendrán solo en verano pero a la larga demandarán segunda residencia”, opinó. “Castellón tiene que subirse al barco de Alicante, que ahora se lleva el 50% de ventas de vivienda para extranjeros”. H