CulturArts no cumple. Y es que la Conselleria aún no ha hecho efectiva la creación de una subdirección general para Castellón, después de que la medida fuera anunciada durante el pasado mes de noviembre por el propio secretario autonómico de Cultura, Albert Girona.

De esta manera, la Generalitat continuará, hasta nuevo aviso, controlando la programación cultural de la provincia desde su sede en Valencia. Después de que Vicent Marzà, conseller de Educación, nombrara ayer al nuevo director general de CulturArts, Abel Guarinos, y al responsable del Consorcio de Museos, José Luis Pérez-Pont, la apuesta por la cultura para la provincia es una incógnita. Y es que, según informó la Conselleria, la posibilidad de crear nuevos proyectos para Castellón y desde Castellón no está sobre la mesa. Y tampoco se sabe cuándo comenzarán a trabajar en ello. Tal y como manifiestan, se espera un largo periodo de reuniones hasta que se anuncie a un nuevo subdirector de CulturArts para Castellón, algo que tendrán que evaluar los recién nombrados responsables Guarinos y Pérez-Pont, así como pasar por un concurso público.

Es por ello que el proceso podría demorarse aún más, y desde el Consell dejan en el aire la posibilidad de poder cerrar el tema durante este año. “Por el momento, no hay cambios en lo que respecta a la unidad de Castellón y desconocemos todavía si va a haber modificaciones en la estructura organizativa” del ahora denominado Instituto Valenciano de Cultura. Así de dubitativos se mostraron ayer desde el Consell después de la rueda de prensa en la que presentaron dos nuevas direcciones culturales.

Hay que recordar que desde que el consejo de dirección de CulturArts acordara en noviembre del pasado año el despido del coordinador de programación de Castelló Cultural, Vicente Farnós, la unidad territorial en la provincia se encuentra desierta. Y ya han pasado cinco meses.

PLAN ESTRATÉGICO // Hace tan solo unos días la Generalitat presentó el plan estratégico cultural valenciano para los próximos cuatro años, un proyecto que está dotado con 500 millones de inversión. Un programa en el que no se concretó ninguna actuación ni evento concreto para Castellón.

Una muestra más del olvido de la provincia por parte de Generalitat que, unido al control de la programación desde Valencia, han provocado un bajón cultural que ha sido rescatado por los ayuntamientos y la Diputación. H