Las obras que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) lleva a cabo desde la semana pasada en el trazado entre Barracas y Teruel han provocado que más de 1.300 viajeros hayan sido ya derivados al autobús. Cada día, una media de 80 clientes por sentido deben modificar su rutina de viaje, según han reconocido a este diario fuentes de Renfe.

Estos viajeros deben bajar del tren en Barracas o en Caudiel (hay una frecuencia afectada en este punto) y subirse al autocar si van en dirección a Teruel, o bien realizar este mismo trayecto hasta Barracas o Sagunto (es un autobús el que debe realizar este recorrido más largo) si en cambio quieren dirigirse hacia València.

Mientras tanto, ayer el PP provincial calificó de «inevitables» las molestias y destacó el inicio de las obras, que con 4 millones de euros permitirán elevar la velocidad en ocho puntos del trazado a partir de julio (las actuaciones deben acabar el 30 de junio).

SUPRIMIDO

Por otra parte, ayer otro tren de Cercanías de la línea C-6, el Castellón-València de las 9.25, fue suprimido, con las consiguientes quejas de los usuarios. Desde Renfe señalaron a este diario que los viajeros fueron trasladados al siguiente tren, que salió «15 minutos después».