Apenas cinco minutos duró el último pleno del mandato 2015-2019, la sesión escoba para aprobar actas, a la que acudieron 25 de los concejales que conforman la corporación --faltó el edil popular Javier Moliner y la portavoz de Ciudadanos, Cristina Gabarda, a la que se vio en València en la sesión de investidura en Les Corts, donde es diputada--. Acudió Ali Brancal, a quien Compromís forzó a renunciar a su nueva acta de edila hace apenas una semana. Sin apenas cruzar palabras con sus compañeros de bancada, Brancal entró y salió del salón de plenos sonriente, y sin querer hacer declaraciones a los medios sobre su marcha. Estar en este pleno, de puro trámite, fue su último acto oficial como edila y una forma de hacer valer su condición hasta el último día.

Al término del pleno, la alcaldesa en funciones, Amparo Marco, emplazó a todos los ediles electos a una reunión en la sala de juntas para abordar la organización de la sesión de investidura de la nueva corporación, que tendrá lugar el sábado a partir de las 12.00 horas. Por este motivo, y para terminar de firmar documentos, fueron desfilando por el Palau Municipal los nuevos ediles, entre ellos los candidatos que se estrenan este mandato; como el de Ciudadanos, Alejandro Marín-Buck; el de Vox, Luciano Ferrer, y el de la confluencia Podem-CSeM-EU, Fernando Navarro.