Los alumnos y profesores de la asignatura de Ciencias Aplicadas de 4º de ESO del Matilde Salvador, en Castelló, forman parte de una iniciativa destinada a crear la comunidad educativa más atractiva de Europa. Son, en cierta medida, pioneros de lo que en un futuro puede ser la enseñanza global en la Unión Europea, en la que estudiantes de todo el continente puedan interactuar con otras culturas sin necesidad de viajar ni de salir de los límites de los centros educativos.

El citado curso del Matilde Salvador ha decidido incluirse en la comunidad eTwinning, cofinanciada por Erasmus+ (el programa europeo para la educación, formación, juventud y deporte) y que ofrece al alumnado y el profesorado participantes una plataforma para comunicarse, colaborar y desarrollar y compartir proyectos. En concreto, los estudiantes del instituto castellonense se han decantado por dos proyectos: ambos relacionados con la salud y la ecología los factores que la pueden poner en riesgo.

Alumnos del Matilde Salvador de la asignatura de Ciencias Aplicadas

Uno es W-health…what else?, en el que los jóvenes de 4º de ESO del Matilde Salvador comparten trabajo con compañeros de centros educativos de Francia, Italia, Rumanía, Albania, Lituania, Turquía y otros puntos de España. Profesores y alumnos se mezclan en grupos mixtos de distintas nacionalidades para crear contenido (encuestas, presentaciones...) relacionado con los hábitos alimentarios, nutrición, comida y sostenibilidad, tradiciones gastronómicas y comidas saludables. Las videoconferencias y los webinars son las vías de interacción.

El otro proyecto en el que está inmerso el Matilde Salvador es Chemistry Around Us, en el que además de centros educativos españoles participan alumnos y docentes de Francia, Grecia, Letonia y Turquía. Este proyecto está dedicado a analizar la composición de productos de limpieza, comida, cosméticos o material escolar y detectar los componentes o ingredientes que pueden ser peligrosos para la salud. Además, los alumnos de estos cinco países han compartido recetas naturales como alternativa a los productos industriales.

"Aparte del trabajo puramente técnico, los chicos y chicas han trabajado en iniciativas más creativas, como poemas, dibujos, pósters y señales para concienciar sobre la necesidad de un futuro más ecológico, además de la composición de canciones para la preservación de la vida natural, la protección de los bosques, los ríos y los mares, y la prevención del uso de productos químicos tóxicos peligrosos para la salud", explica Tula Albalat, jefa del Departamento de Física y Química del Matilde Salvador.

"Ha sido una experiencia muy interesante, ya que los alumnos han trabajado la asignatura de Ciencias Aplicadas de una forma muy motivadora y han desarrollado competencias digitales, sociales, lingüísticas y científicas", añade la profesora, que también valora el plus de aprendizaje del inglés -el idioma en el que se imparten las videoconferencias y webinares y con el que interactúan los participantes- como otro de los muchos aspectos positivos de eTwinning. Una educación global a nivel europeo empieza a ser posible y un centro de Castelló forma parte de ello.