La decana de las comisiones falleras de la Vall d’Uixó vivió ayer su día grande con la exaltación de sus máximas representantes en el 2018: la niña Anna Pelegrín Garcés y la joven Alejandra Corredera Fernández, acompañadas por los presidentes Toni Vicente-Ruiz y Juanvi Corredera.

El día amaneció gris y la lluvia amenazó con aguar la fiesta. De hecho, llegó a suspenderse el pasacalle de acompañamiento hasta el Teatro Municipal Carmen Tur en primera instancia, aunque finalmente se pudo realizar con un ligero cambio de recorrido.

Los asistentes a la presentación tuvieron la oportunidad de disfrutar de un acto muy familiar y emotivo desde el primer momento, dado que los presentadores fueron los hermanos de ambas falleras mayores, Cristina Corredera Fernández y Álex Pelegrín Garcés, al tiempo que el encargado de hacer de mantenedor era el primo de la infantil, Fran Daniel Garcés.

LA MAGIA DE LAS FALLAS / Daniel centró su discurso en la magia que suele acompañar a esta fiesta y lo ejemplificó en la relación de las dos falleras mayores, al recordar que, en el año 2013, Anna Pelegrín no pertenecía a ninguna comisión, pero asistió con sus padres a su primera cremà en la que se emocionó al ver a la representante infantil, que no era otra que Alejandra Corredera.

Tras aquella experiencia, Anna le pidió a sus padres ser de la Pensat i Fet, y poco después se ha convertido en su fallera infantil precisamente junto a quien la inspiró, ahora fallera mayor, que también vivió su momento personal especial, cuando quien fuera presidente infantil en el 2013, David Buendía, protagonizara el arranque de su exaltación.