Almassora tiene la mente puesta en la próxima temporada estival y pese a que, presumiblemente, volverá a estar marcada por el coronavirus, el objetivo es revolucionar la playa para sacarle el máximo provecho, con un impulso a la práctica de deportes y la ampliación de espacios para el ocio.

La alcaldesa, Merche Galí, firmó el plan de explotación de servicios del verano 2021 para solicitar autorización al Servicio Provincial de Costas de Castellón y ampliar la actividad en el litoral.

Entre otras iniciativas, el Ayuntamiento incorpora novedades, como la gestión de un puesto de hamacas a través de una concesión, una terraza más para un negocio de hostelería instalado en primera línea de playa y un acceso para motos náuticas. Todo ello se suma al chiringuito, que dispone de autorización hasta el 2023, tras recuperarlo el pasado año, después de cinco sin oferta.

LOS DETALLES // En el caso del negocio dedicado al alquiler de hamacas, el consistorio solicita la ocupación del dominio público al Ministerio de Medio Ambiente para, posteriormente, proceder a su explotación y mantenimiento por el sistema de concesión. Los servicios municipales han determinado las dimensiones a cumplir y las superficies objeto de concesión, así como las estimaciones sobre inversiones necesarias, temporada de apertura en julio y agosto, gastos y el importe del canon establecido para la licitación, que Costas sitúa en 150 euros, aunque el consistorio rebajará esa cantidad y la dejará en 100 euros.

Según la distribución prevista, la playa de Pla de la Torre podría acoger la pérgola adaptada, así como los recintos para la práctica de pilates y yoga. Por su parte, Benafelí dispondría del espacio para piraguas y paddle surf, además de un recinto de acceso y un área de entrenamiento para motos náuticas. De autorizar la instalación, esta playa incorporará también la terraza de un negocio privado situado en primera línea costera.

De igual modo, el plan de explotación incluye el servicio de asistencia y salvamento en el mar (dos casetas), lavapiés, pasarelas y papeleras, zonas lúdicas, aseos químicos, pérgolas adaptadas y balizamiento de la costa, así como la delimitación temporal de zona de varada para embarcaciones de vela ligera o similares, además de los accesos para vehículos con remolque de embarcaciones, biblioteca, zona de arbolado y chiringuito, que tiene todavía tres años de concesión tras abrir en el 2020.

VALORACIÓN / El concejal de Playas y Turismo, Joan Antoni Trenco, destaca la incorporación de nuevos servicios en la oferta del litoral como ejemplo de dinamización: «Es también una oportunidad más de negocio para quien quiera aprovechar la temporada de verano tras este invierno tan difícil».

El plan abarca las playas de Pla de la Torre y Benafelí. La situada en la desembocadura del Millars queda fuera, por lo que no afecta a la Red Natura 2000, tal como resaltaron los técnicos a Costas.