Burriana culminará la urbanización de una calle del Grau después de dos décadas
El consistorio contrata la asistencia técnica para iniciar los trámites necesarios para las obras
La previsión es empezar los trabajos en septiembre del 2025
El vial, ubicado en segunda línea marítima, está inacabado y le falta el alumbrado y aceras en un margen. / Isabel Calpe
El Ayuntamiento de Burriana mueve ficha para finalizar la urbanización de la calle Vinaròs. El vial, ubicado en segunda línea marítima de la zona del Grau, se encuentra junto a una unidad de ejecución realizada hace 20 años, pero que no se completó en uno de sus márgenes. Por ello, el consistorio ha contratado a una empresa para realizar el asesoramiento técnico y jurídico necesario con el objeto de poner en marcha las obras y reordenar el espacio urbano.
El concejal de Urbanismo, Juan Canós, explicó que «aunque el proceso aún requiere de varios pasos administrativos, la previsión es que las labores de urbanización puedan comenzar después del verano de 2025». De este modo, el proyecto contemplará la instalación de todo el entramado de iluminación pública, así como el desarrollo de las aceras, unas labores que, según estimó el edil, podrían conllevar una inversión de 100.000 euros que repercutirá en los propietarios de los terrenos.
Aunque el alcantarillado ya está instalado, la finalización de esta urbanización es crucial para reordenar adecuadamente el espacio, actualmente congestionado y con un paso muy estrecho debido a las irregularidades de las construcciones existentes, muchas de ellas en desuso y sin mantenimiento.
Cerrar expedientes
La iniciativa está enmarcada en la voluntad del equipo de gobierno de cerrar expedientes, es decir, «acabar las unidades de ejecución que, por variados motivos, no llegaron a culminarse y que derivan en problemas para los vecinos, además de desorden urbanístico», apostilló Canós.
Asimismo, el asesoramiento técnico y jurídico servirá también para decidir por qué vía se ejecuta la urbanización, ya sea mediante gestión directa o bien por contribución especial.
En esta línea, el gobierno local ya ha mantenido varias reuniones con vecinos afectados por la planificación urbanística como, por ejemplo, los de la calle Ribesalbes, con los que se acordó poder avanzar en una solución para dotar de servicios esenciales al vial ubicado en la zona marítima. Se trata de un sector con muchas viviendas, pero que están localizadas a una cota tan baja que sufren graves inundaciones en episodios de lluvias.
Del mismo modo, el contacto también se ha extendido a los empresarios del camí Vell de València que piden poder desbloquear la urbanización que pesa sobre la unidad para poder ampliar sus negocios y otra de las previsiones del ejecutivo es finalizar la unidad B-2, situada detrás del colegio Villa Fátima y para la que se han reservado 200.000 euros en el presupuesto municipal de 2024.
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