La lluvia deslució ayer la entrada en vigor de la ampliación horaria de bares y restaurantes de la provincia de Castellón hasta las 22.00 horas, cuando comienza el toque de queda. Este nuevo horario, que permite al sector de la hostelería abrir cuatro horas más, permanecerá vigente hasta el próximo 9 de mayo, fecha del fin del estado de alarma. A partir de entonces, el Consell deberá decidir si suaviza más las restricciones y avanza con paso firme hacia la desescalada con la vista puesta en «salvar el verano», como ha reiterado en diversas ocasiones el presidente de la Generalitat, Ximo Puig.

A pesar de que el mal tiempo no animó a salir, los bares ya están empezando a registrar reservas para cenar este próximo fin de semana, lo que constata que los clientes se adaptarán al nuevo horario, más típico de los países europeos. «Las reservas van bien. Recuperamos el tardeo y un turno temprano de cenas», afirmó ayer el vicepresidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de Castellón (Ashotur), Luis Martí. 

Desde la patronal castellonense insistieron ayer en que se ha entrado ya «en la última fase antes del levantamiento del estado de alarma. Lo hacemos con mucha esperanza en una pronta recuperación de la normalidad». «Estos próximos 15 días, con la ampliación de horario, se presentan con optimismo debido a la buena acogida de los clientes», apuntó.

Ganar más clientes

Por su parte, uno de los portavoces de la Asociación de Hosteleros de Castellón, Antonio Vives, explicó que el objetivo es incentivar «el picoteo durante toda la tarde, abriendo las cocinas a las 18.00 horas, para que los clientes puedan comer algo para así, con tapas, cenar sin darse cuenta». Sin duda, la hostelería confía en recobrar la clientela y mejorar la facturación, tras el cierre del pasado invierno y semanas con duras restricciones.

Además, ayer el colectivo SOS Hostelería de la Comunitat pidió ampliar el toque de queda hasta las 22.30 horas para que el sector pueda aprovechar la totalidad del horario de apertura, ya que ahora debe hacerlo un poco antes por el veto a la movilidad nocturna. 

Restricciones

De momento, se mantienen los mismos aforos que hasta ahora, es decir, las terrazas al 100% y un tercio el interior de los establecimientos y la ocupación de las mesas sigue en un máximo de seis personas por mesa salvo que sean convivientes. El consumo será siempre sentado en mesa y la mascarilla es obligatoria y solo se retira si se consume. Además, sigue prohibido el uso de la barra, fumar y emplear dispositivos de inhalación de tabaco.

El comercio espera clientes con el tirón de la hostelería

El comercio también pudo ampliar ayer su horario hasta las 22.00 horas, lo que supone dos horas más que hasta ahora. Para el sector resulta crucial que la hostelería pueda abrir más, ya que esto genera una especie de efecto contagio positivo. «Nos va a venir muy bien poder abrir hasta más tarde, porque ahora cuando cerraban los bares se quedaba todo muerto y no se veía a nadie», explica el presidente de la Confederación de Comerciantes y Autónomos de la Comunitat (Covaco) de Castellón, Juan Adsuara.

Por su parte, el portavoz de la Asociación Nacional Grandes de Empresas de Distribución en la Comunitat, Joaquín Cerveró, aplaudió la medida, aunque aclaró que muchos negocios no van a poder retomar su horario hasta las 22.00 horas, porque deberán cerrar antes debido al toque de queda. «Antes teníamos que tirar a los clientes a la calle para cerrar por lo que ahora se ganan horas de venta», afirmó.