En la última década, la dramaturgia castellonense parece vivir un estado de gracia. Pese a las dificultades propias de una profesión que (casi) siempre permanece en la sombra, y con los inconvenientes económicos que desde hace dos años afectan a todos, fruto de una pandemia global, una crisis económica y energética y una guerra, el teatro sigue erigiéndose en un espejo de la condición humana, y los autores teatrales siguen siendo agudos analistas de todo cuanto acontece, de todo aquello que, de un modo u otro, afecta al ser.
Ya sea la actualidad o el pasado más reciente, cualquier tema o inquietud cobra vida sobre un escenario a través de los textos que autoras como Mafalda Bellido conciben, reflexionan y posteriormente vierten sobre la página. Si en Les Saurines, producción del Institut Valencià de Cultura (IVC) que se estrenó el pasado 2021, los misterios familiares eran protagonistas, en la nueva producción de La Zafirina –compañía teatral de la propia Bellido junto a Sergio Serrano– es la historia reciente española, concretamente, el periodo franquista, el que cobra especial interés para la dramaturga de Altura.
En coproducción con La Rambleta, el próximo 30 de septiembre se llevará a cabo el estreno de esta obra en ese mismo espacio escénico de la capital del Túria. Dirigida por Sergio Serrano, el elenco de la obra cuenta con la presencia de la misma Mafalda Bellido, acompañada por Lola López, Ernesto Pastor, Jorge Valle y la también actriz y dramaturga castellonense Begoña Tena –otro nombre de referencia en la actual escena teatral autonómica, como lo demuestra el Premio Íntim SGAE 2022, por su obra Viva, o el Premi de les Arts EscèniquesValencianes por su participación en la pieza Presoners–.
La historia
Los que comen tierra es un texto de Mafalda Bellido que surgió del I Laboratorio Ínsula Dramataria Josep Lluis Sirera, proyecto impulsado por el IVC.
La pieza, tal y como señalan desde La Zafirina y La Rambleta, quiere «dar voz a los que no la tienen, a los muertos de nuestra historia reciente». Así, son «los miles de ejecutados por el régimen franquista que siguen enterrados en las cunetas y los caminos de nuestro país» los protagonistas de esta historia que es, también, «un homenaje a las familias de estas víctimas, que luchan por la dignidad y la reparación de la memoria de sus antepasados».
«Esas fosas sin abrir son las miles de heridas sin saturar que aún nos quedan por rehabilitar en un país que se empeña en hacer tabula rasa de su pasado más reciente», explica la compañía de la dramaturga y actriz del Alto Palancia, autora de textos tan reconocidos como Chucho.
El 30 de septiembre, a las 20.30 horas, será la primera representación de esta obra que se podrá ver también los días 1 y 2 de octubre, a las 20.00 y 19.00 horas respectivamente. Una nueva incursión de Bellido sobre la memoria, tanto personal como colectiva, en la que vuelve a dejar patente que los autores teatrales de la provincia de Castellón tienen mucho que contar, y que sus historias sobre el escenario son, además, dignas de los mejores elogios.
