Es el derbi de la necesidad. Para unos y para otros. Hoy, en Mestalla, se juntarán el hambre y las ganas de comer. En el Valencia, la urgencia de la victoria para no dejar escapar el tren de la Liga de Campeones. En el Villarreal, los puntos --uno, por lo menos-- para coger un poco de oxígeno cara a la recta final en la lucha por la permanencia en Primera. Una victoria de los amarillos les daría el 50% de la salvación.
Los antecedentes del Submarino en Mestalla no son nada halagüeños --tres visitas, tres derrotas--, pero como dice Benito Floro: "¿Por qué no puede salirnos un buen partido en Mestalla y lograr la victoria?". Todo dependerá del Villarreal que salga al feudo valencianista. Si es el de la última salida, en Huelva, las opciones de sacar algo positivo se reducirán a la mínima expresión, pero el técnico amarillo confía en que la necesidad de puntuar en Mestalla dé esa dosis extra de motivación a los suyos para dar la sorpresa. "El campo del Valencia no es donde uno piensa que es fácil ganar, pero necesitamos la victoria y saldremos a por ella", apuntó Floro, que también espera que el árbitro no se deje influir "por la presión" de la afición del Valencia.
´ONCE´ DEFINIDO
El preparador del Villarreal, fiel a su costumbre, no oculta las cartas con las que le va a intentar ganar la partida al Valencia. Benito Floro tan sólo cambiará sus peones en función de los retornos de Belletti y Arruabarrena en los laterales y la ausencia por lesión de Víctor Fernández, que ayer no pudo superar la última prueba para entrar en la convocatoria ante el Valencia. Su baja permitirá la entrada en el once de Calleja y del canterano Héctor Font en la lista de los 18 que viajarán a la capital del Turia.
En el conjunto che, las dudas también se han disipado en parte y Benítez --obligado por la baja del examarillo Albelda-- pondrá en escena una alineación con rombo en el centro del campo, donde Baraja será el hombre más defensivo y Aimar el enlace con la pareja de atacantes.
La única incógnita que mantiene el técnico valencianista es la del acompañante de Carew en el ataque. Juan Sánchez y Mista se disputan esa plaza, ya que el noruego será fijo. Sus cinco goles ante el Villarreal --tres la pasada campaña, en el último derbi en Mestalla, y otros dos esta temporada, en el partido de la primera vuelta en el Madrigal-- son una garantía para su entrenador.
