Un espíritu de humildad está instalado en el vestuario del Castellón. Es el que les ha llevado hasta el liderato y acumular ya 12 partidos sin perder. Pero si hay un futbolista alejado del prototipo de estrella o divo, ese es Marcos Estruch. Su trabajo siempre ha estado fuera de toda duda, incluso cuando acabó de salir de la lesión y le costaba ver portería. Pero ahora ha vuelto a ser el de antes: lleva cuatro goles en Liga, conseguidos en las últimas cinco jornadas. Y, curiosamente, contra Villajoyosa y los más recientes, Gramanet y Mallorca B, han servido para conseguir el 1-0 a favor del Castellón.

UNA DURA FRAGUA Su carácter honrado está forjado en las apreturas familiares. Perdió a su padre con tres años y pronto se vio obligado a ganarse la vida, pero no con el fútbol. Comenzó a trabajar de peluquero, a lo que volverá una vez cuelgue las botas; y seguro que no hubiese existido el paréntesis en el que actualmente se encuentra si aquel modesto Gandía en el que militara, no hubiera sido campeón de grupo en 2ª B (temp. 99/00), con César Ferrando en el banquillo.

Su carrera deportiva dio un giro radical y emigró a Cartagena. Pero tampoco tuvo suerte allá, por una grave lesión y los problemas económicos de la entidad --todavía le debe prácticamente la mitad del dinero que tendría que haber percibido en esos dos años--. Tampoco le rodaron bien las cosas en el Jaén, donde acabó jugando un par de meses antes de venir al Castellón --el equipo andaluz bajó a 2ª B-- Y ha sido aquí donde la fortuna ha vuelto a sonreír al currante del área.

Su entrega es tal que tiene el cuerpo marcado por las heridas de la batalla. Sus cicatrices en la cara, labios o piernas denotan que nunca se ha arrugado ante nada ni ante nadie. Y es por ello por lo que a pesar de acabar contrato al final de la presente temporada, ya tiene una oferta de renovación encima de la mesa.

Ahora, por primera vez en toda la temporada, Oltra dispone de todo su arsenal ofensivo. Eloy, Serrano, Quero, Ollés y él mismo están disponibles, por lo que la competencia será muy dura. Sin embargo, Marcos está llamado a ser un fijo en el once. De momento, lo refrenda con números: con él, el Castellón presenta una balance de seis victorias, tres empates... y ninguna derrota.

Esa impresionante racha pasará una reválida en el Francisco Artés Carrasco. "Fuera de casa, el equipo ha dado una buena medida", comenta sobre la dificultad del encuentro en Lorca. Ahí están los precedentes de N stic, Girona, Alicante, Gramanet... Allí, en tierras murcianas, puede verse un curioso duelo de delanteros: él con Aitor Huegun, el máximo artillero local con 10 tantos. "Habrá que estar muy atentos para defenderlo", señala, una misión que, seguramente, le será encomendada.