Real Madrid y Barcelona han desenterrado el hacha de guerra. No es que lo hayan hecho abiertamente, pero este verano están protagonizando una serie de desencuentros que ponen en entredicho las que hasta no hace muchas semanas eran unas relaciones cordiales, una vez Florentino Pérez y Joan Laporta accedieron a la presidencia de sus respectivos clubes. Esto ha supuesto, hasta el momento, un paréntesis en la enemistad, que muchas veces ha trascendido lo deportivo para instalarse en la política y en la sociedad.

El caso Eto´o ha dejado huella. Los azulgrana denuncian triquiñuelas de su eterno rival para evitar que el camerunés recale en el Camp Nou, después de la oferta de 21 millones de euros que Laporta le ha ofrecido al Mallorca, club con el que el Madrid comparte los derechos federativos del jugador. Ahora, si los blancos quieren quedarse con el ariete, deberán igualar esta oferta. El caso es que si lo hace, será para incluirlo en alguna operación de fichajes, ya que el cupo de extracomunitarios ya está cubierto en el Santiago Bernabéu.

En los últimos días, también circuló el comentario de que el Madrid, herido por que el Bar§a había negociado con un jugador suyo, iba a lanzar un contrataque, que sería una oferta por Puyol, lo que ha contribuido a tensar la cuerda aún más.

PREFIRIERON EL AZULGRANA Han sido dos recién llegados al conjunto de Frank Rijkaard, el brasileño Edmilson y el portugués de origen carioca Deco, los que también han aportado su granito de arena a la disputa. Y es que, según han asegurado ambos, Florentino interfirió en las respectivas negociaciones con el club culé, aunque al final se decantaron por jugar a orillas del Mediterráneo y no en el centro.

A tres semanas para el inicio de la temporada, la rivalidad entre los dos grandes del fútbol español amenaza con recrudecerse, ya que el interés en fichar a Eto´o del Barcelona, que hoy dice adiós la gira asiática con un partido frente al al International Shanghai Club de China, a buen seguro avivará la llama.