Si había alguna posibilidad de que Pepe Moré cambiara sus planes para el partido de Anoeta, el encuentro de ayer la borró por completo. Los teóricos suplentes no pusieron demasiado de su parte para que su entrenador se replantee algo nuevo para el estreno liguero del próximo domingo ante la Real Sociedad.

Moré puso en liza en el amistoso de Alcoi, el último de la pretemporada, un híbrido entre los hombres que se perfilan en el once inicial de San Sebastián y los que deberán esperar alguna jornada más a tener opciones de hacerse un hueco en el once. Ante el Alcoyano jugaron Oliva --ya totalmente recuperado--, Dealbert, Aurelio, Víctor Salas y Tabares, los cinco con casi todos los números para estrenarse en la Liga.

El resto del equipo inicial en El Collao salía con la misión de reivindicarse ante Moré, pero no lo logró. El centro del campo con Pendín e Ibon no aportó prácticamente nada. Un poco más Oberman, pero sin llegar nunca a desequilibrar a una defensa de Segunda B. Los casos de Zamora y Pol fueron diferentes. El primero no puede jugar el primer partido de Liga por sanción, mientras que el de Moncofa cumplió sin complicaciones y ganó unos puntos más en la confianza del entrenador albinegro.

CAMBIOS Y GOLES Si no la imagen, la efectividad del Castellón subió algunos enteros tras los cambios efectuados por Moré en la segunda mitad. Con Perico y Arana, los albinegros ganaron en profundidad y las llegadas al área del Alcoyano --prácticamente inexistentes en la primera mitad-- aparecieron con cierta asiduidad.

Fue momento de experimentos. Perico en la punta de ataque, Oberman en la mediapunta... Aunque sin brillantez, el Castellón apretaba más por culpa de la inercia de ser un equipo de superior categoría. Aurelio plasmó ese dominio en el 0-1. Pero la renta solo duró nueve minutos. Justo el tiempo que tardó el exalbinegro Marcos en cazar uno de esos balones caídos del cielo que tanto le gustan para sorprender a Oliva. El Castellón, así, despedía los amistosos de pretemporada en los penaltis. Y de forma tan irregular como el resto del partido. Los errores de Oberman y Zamora dieron el trofeo al Alcoyano.