El Barcelona defraudó en su visita al Racing y no logró pasar del empate pese a que los cántabros jugaron media segunda parte con un hombre menos por la expulsión del debutante Smolarek, sin embargo, fue un justo resultado para un Racing que plantó cara a un equipo muy superior sobre el papel, pero que jugó sin ritmo y dispuso de menos ocasiones que los locales.

No obstante, la primera ocasión, que fue muy clara, la creó el Racing cuando aún no se habían jugado cinco minutos de partido. Serrano, libre de marca en el vértice del área chica, recibió un balón claro pero no acertó a superar a Valdés.

Los de Rijkaard parecían muy seguros de su superioridad y se empleaban a un ritmo muy lento, lo que favorecía al cuadro de Marcelino, como en la recuperación de balón con la que Jorge López habilitó a Colsa, para que éste encarara y cruzara su disparo a la base del poste derecho.

El primer disparo a puerta del Barcelona llegó en el minuto 38 y, para ello, necesitó una falta lejana, que ejecutó Ronaldinho demasiado alta. Poco después remató Oleguer, también fuera.

Esas dos acciones animaron al Barcelona, que pudo adelantarse con un excelente servicio de Ronaldinho sobre Xavi, que controló y colgó en vaselina sobre la salida de Toño, pero Luis Fernández reaccionó bien y sacó el balón sobre la misma raya de gol.

Tras el descanso Marcelino sentó a Iván Boladoy sacó al polaco Smolarek, que fue presentado el viernes y añadido a una lista de convocados en la que el sábado no figuraba. Y Rijkaard también quiso más mordiente ofensiva para lo cual recurrió a Henry, por un inoperante Messi.

Una nueva falta sacada por Ronaldinho, con más peligro que la anterior, y un remate a la media vuelta de Smolarek, que despejó la defensa, fueron lo mejor del arranque de la segunda parte en la que el Racing seguía mostrando más ambición que el Barça.

Pero a Smolarek ya no le dio tiempo a hacer nada más, porque fue expulsado poco después con tarjeta roja directa por una dura entrada sobre Abidal. Triste debut del polaco que sólo estuvo 12 minutos en el campo.

A partir de ahí el Barça puso cerco a la portería de Toño y pudo marcar en una gran acción de Henry, cuyo disparo lejano fue repelido por el poste. Pero el Racing se defendió bien y aguantó hasta el final sin demasiados apuros.