Salvo sorpresa, la plantilla del Castellón cobrará las nóminas pendientes (entre dos y tres, según los casos) en julio. Es lo que David Cruz le ha trasladado en los últimos días, con lo que se irá más allá del 30 de junio. Aunque el silencio de todas las partes es notorio, la demora no conllevaría otro descenso, al inhibirse la federación valenciana (FFCV) por tratarse de contratos amateurs (sí congelaría los derechos federativos, impidiendo la tramitación de fichas hasta la liquidación de la deuda), a expensas de qué grado de fuerza pudieran tener tanto la AFE como la RFEF.

Han ido venciendo los plazos que el presidente ha ido dando a los jugadores sin que éstos perciban lo adeudado, lo que ha motivado que algunos (más de una decena) lo denunciaran a la FFCV, organismo que hizo llegar las reclamaciones al sindicato.

Precisamente, el presidente ha comunicado a varios de los jugadores albinegros que él tratará directamente con la AFE el pago de las nóminas, después de los contactos mantenidos en las últimas semanas. Incluso los futbolistas más díscolos, aquellos que han llevado adelante sus reivindicaciones y los que se han mostrado más beligerantes a la hora de reclamar lo adeudado, podrían cobrar más tarde, dando prioridad Cruz a aquellos que se han mostrado más dóciles.

Es más, ha habido jugadores que han tenido dificultades a la hora de negociar con Cruz la obtención de la carta de libertad para poder irse a otro equipo, que éste supeditada a que perdonaran lo que el Castellón le debía. H