A pesar de sufrir en 2012 la sanción de por vida de la UCI tras confirmarse su dopaje, con la consecuente retirada de los siete Tours de Francia que ganó de 1999 a 2005, Lance Armstrong no pierde el hábito deportivo que le acompañó a lo largo de su carrera. Alejado de la que había sido su rutina de trabajo, el exciclista estadounidense sigue esforzándose a fondo en su objetivo de competir este verano en algún triatlón, modalidad con la cual ya ha mostrado su empatía. "La gente está preparada para mi vuelta al deporte. De manera egoísta diría que sí merezco competir en triatlón, y nos estamos acercando a ello", afirmó el estadounidense hace meses a la 'BBC'.

Con un duro trabajo de gimnasio, las imágenes mostradas de Armstrong ejemplifican que su objetivo está cada vez más cerca de hacerse realidad.