El Real Madrid mete presión en la lucha por el título de Liga

A ocho puntos del Barcelona y con el Atlético por el medio, el Real Madrid se reengancha a la Liga, a la espera de los partidos más exigentes, encadenando sensaciones positivas y resultados consistentes. También ante un Alavés desfondado después de protagonizar un espectacular arranque de competición.

Benzema continúa desprendiendo veneno para el rival en cada sutil acercamiento que experimenta con el balón, dulce y minucioso. Volvió a abrir el marcador, atacando un centro raso y tenso al corazón del área, contraviniendo al pie de la letra el ideario de sus críticos. Con el marcador en contra, el plan inicial del Alavés tuvo que reconvertirse en torno a una idea de ataque que le sentaba como un bañador para una boda. El Madrid siguió mandando, con Bale sin aparecer demasiado. De hecho, cuando el galés se fue el banquillo, Vinicius recuperó protagonismo desde su punto de partida predilecto, la banda izquierda. Regresó la sociedad con Benzema y volvieron, como las golondrinas con la primavera, las ocasiones de un Madrid que empezó a disfrutar de cada jugada. Los de Solari terminaron de sentenciar, ya casi al final, de la mano del brasileño, crecido hasta intentar cualquier excentricidad después de haber marcado, lo que le valió la ovación del Bernabéu. Y con el tiempo cumplido, Mariano conectó un soberbio e inapelable cabezazo a centro de Odriozola para el 3-0.