De Guadalajara, allí nació y allí vive. Abel, de 29 años, explica que se hizo del Villarreal cuando Riquelme falló el penalti ante el Arsenal, precisamente en las única semifinal en Champions League en 2006: “Mi padre me dijo, ven que hay un partido interesante. Empecé a llorar y me pregunté: ¿por qué me duele?, ¿por qué me siento tan orgulloso?, y desde entonces seguía al equipo y veía los partidos cuando venían a jugar contra el Madrid o Atleti.

Madrid - Liverpool es el trayecto para ver a su Villarreal y disfrutar de un día mágico. Pero no es la primera vez que lo hace. Hace pocos meses, Abel se fue a la aventura a Turín, a pasar unas vacaciones en Italia y a ver el partido ante la Juventus: “No encontraba entrada, pero gracias a Marcos Senna la pude conseguir”.

Y cosas del destino, gracias a Turín pudo ir a Anfield. En la ciudad italiana conoció a dos chicos. Uno de ellos, Sergio, que ya con el viaje ya reservado, madrugó y fue a las taquillas para conseguir in extremis esa entrada que Abel tanto deseaba: “Estoy super agradecido, le invitaré a algo en Liverpool. Lo más orgulloso de estos viajes son los colegas que me estoy encontrando por el camino”.

 Por último, es optimista de cara al partido y sobre todo, quiere disfrutar de un día mágico: “Espero disfrutar de Anfield, ya hemos hecho la gesta ante el Bayern, pero que Europa no se olvide que este equipo es capaz de todo”.