Energía

Las renovables proponen incluir una suerte de 'licencia social' entre los requisitos para construir un parque

La Declaración de Impacto Ambiental (DIA) es uno de los requisitos necesarios para poder construir un parque renovable en España

Las renovables proponen incluir una suerte de 'licencia social' entre los requisitos para construir un parque.

Las renovables proponen incluir una suerte de 'licencia social' entre los requisitos para construir un parque.

Sara Ledo

"Renovables sí, pero no así", gritó el ganador del Goya a mejor película por 'As Bestas'Rodrigo Sorogoyen, el febrero pasado. El cineasta llevó al 'prime time' televisivo una de las principales problemáticas del sector en los últimos años: la contestación social. Mas allá de la anécdota, las empresas renovables entonan el 'mea culpa' por la falta de pedagogía sobre los beneficios de las renovables ante el aluvión de parques eólicos y fotovoltaicos y prometen trabajar todos a una por una mejora de la percepción social de estas instalaciones. Entre las medidas proponen a las administraciones requerir una suerte de 'licencia vecinal' entre los requisitos de construcción de los parques.

No se trata de añadir más burocracia a la ya de por si lenta tramitación de los proyectos, sino de incluir esta evaluación en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA). "Sería bueno que en el procedimiento medioambiental se demostrase de alguna manera que ese parque tiene aceptación social", ha planteado la directora de desarrollo de negocio en España de Acciona Energía, Marta Fernández, en un debate sobre esta problemática durante la primera jornada del Congreso Eólico Anual organizado por la Asociación Empresarial Eólica (AEE).

La Declaración de Impacto Ambiental (DIA) es uno de los requisitos necesarios para poder construir un parque renovable en España. Quien lo expide es la administración central o la autonómica, en función del tamaño de la instalación. Y en él se evalúa si es conveniente o no la construir un aerogenerador o un panel solar en determinado lugar, en función de las condiciones de protección del medioambiente y de los recursos naturales. Fernández plantea buscar alguna fórmula, como podría ser una encuesta entre los vecinos, para agregar en ese proceso si la comunidad está a favor o en contra de la instalación.

La contestación social es "el principal problema" de esta tecnología de cara al futuro, según el director general de Renovables, Nuevos Negocios e Innovación de Naturgy, Jorge Barredo, que advierte que en Estados Unidos ha llevado incluso a "judicializar permisos" de instalación de parques. En los últimos cinco años, eólica y fotovoltacia han sumado casi 25 gigavatios (GW) de nueva generación, un poco menos de la mitad del total existente. Pero de cara a 2030 se pretenden instalar más de 80 GW nuevos.

"Hemos ido demasiado deprisa y la prisa no nos ha acompañado para sentarnos con los vecinos y obtener la llamada 'licencia social'. Si nadie te cuenta que en el monte que tienes enfrente de tu casa pondrá molinos es normal que te alertes", ha asegurado la consejera ejecutiva de la empresa de renovables Greenalia, Beatriz Mato. "Si hacemos las cosas bien, te presentas ante el vecino, le cuentas que has venido para quedarse y que serás un buen vecino, estoy segura de la aceptación, aunque después venga otro detrás a contaminar", ha añadido Beatriz Mato.

Desde el sector trazan una línea clara entre el "ruido" mediático que generan proclamas como la de Sorogoyen o las asociaciones ecologistas y el malestar vecinal. "Necesitamos diferenciar enter ruido y realidad. Y aunque la aceptación social sea mayoritaria hay que respetar la sensibilidad de las personas y los municipios y entender las reticencias a los cambios en el entorno", ha advertido en la apertura del congreso el presidente de la patronal eólica, Juan Diego Díaz.

Establecer beneficios directos para las comunidades locales como precios más bajos de la electricidad, prioridad para el vertido a la red de las instalaciones renovables o compensaciones económicas es una de las fórmulas planteadas por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para sortear las dificultades del despliegue renovable. Muchos de estas medidas se están poniendo en práctica en algunas regiones, según el director de operaciones (COO) de Europa y Latinoamérica de Repsol Renovables, Enrique Pedrosa, pero "falta compartirlo", añade.

"La parte social solo depende de nosotros. Tenemos que invitar a todos los actores para enseñar todos los beneficios y eliminar todas las dudas. Renovables sí, pero solo así", ha concluido diciendo Marta Fernández de Acciona Energía.