La huelga del transporte está propagando las quejas contra la subida del combustible a toda la economía a nivel nacional, y Castellón no está escapando a las consecuencias. El malestar provocado por la factura energética va contagiándose al resto de sectores económicos, que ven peligrar su continuidad.

Supermercados, fabricantes de alimentos, hosteleros, partidos políticos y sindicatos han apremiado al Gobierno este miércoles a actuar cuanto antes para desactivar el paro de transportistas ante los problemas de abastecimiento que ya se empiezan a producir tras diez días de protestas.

Ante esta creciente presión, el Ejecutivo ha adelantado un día su reunión con el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC) y está seguro de que se llegará a un acuerdo en su encuentro de este jueves. Sin embargo, hay que recordar que la entidad que convoca el paro es la Plataforma Nacional por la Defensa del Transporte Nacional e Internacional, que agrupa a conductores autónomos y pymes, y éstos no están llamados a la mesa y no se sienten representados por el CNTC.

"No daremos por bueno ningún acuerdo que no sea tomado directamente con nosotros (...). Siguen sentándose a negociar con interlocutores que no consideramos válidos", ha advertido el presidente de la plataforma, Manuel Hernández, que hoy mismo ha convocado una manifestación a pie para el viernes, día 25, en Madrid con el objetivo de que el Ejecutivo "visualice a las miles de familias" afectadas.

Con estos mimbres queremos pedir a los lectores que se posicionen ante unas movilizaciones que están provocando consecuencias negativas a la economía en un contexto complicado a nivel geopolítico tras la invasión de Rusia a Ucrania.