La Feria del Libro de Castellón ha perdido interés entre las librerías de la provincia ya que, a pesar de tratarse de la XXI edición, tan sólo participan seis de estos establecimientos. Los 13 estands restantes los ocuparán los servicios de publicaciones de varias instituciones oficiales o editoriales que presentarán sus documentos al público castellonense.

Los escasos beneficios que consiguen los libreros con esta iniciativa y la venta de libros por parte de las grandes superficies, ya que éstas venden también los best sellers, son los dos motivos principales de la escasa presencia de los libreros castellonenses en esta iniciativa que hoy abre sus puertas, hasta el próximo día 8 de mayo. Así lo reconoció ayer el presidente del Gremi de Libreters, Jesús González, al periódico Mediterráneo.

DINAMIZACIÓN A esta situación se une la escasa presencia de autores de primera fila que este año estarán en Castellón para firmar sus obras. "Los autores que catalogamos como segundos espadas llegan a pedir hasta mil euros para venir", explicó González. "Los escritores más conocidos tienen a sus representantes y es difícil que vengan", continuó González. De hecho, ayer por la tarde, todavía faltaba cerrar, por parte de los organizadores, la presencia de algunos escritores.

De esta forma, y con el fin de dinamizar la Feria del Libro, la organización ha previsto varios actos infantiles y cuentacuentos que dinamizarán la plaza Santa Clara durante los nueve días en los que las casetas abran sus puertas al público. De hecho, el propio presidente del Gremi de Libreters reconoció que la feria "sale a la calle para fomentar el ámbito de la lectura, ya que las ventas se incrementan lo mínimo".