Patricia Campos tomó ayer sábado el relevo del Padre Ricardo como el ejemplo de la solidaridad y la entrega a los demás de la provincia de Castellón. Su “generosidad infinita”, pero también su vida llena de “superación, lucha, humildad y ambición”, como destacó Javier Moliner, le han hecho acreedora para ostentar la Distinción a la Solidaridad de la Diputación provincial.

No en vano, esta ondense se ha encargado de romper todas las barreras que ha ido encontrando a lo largo de su vida: es la primera mujer en pilotar un avión a reacción del Ejército de España; y la primera española en entrenar un equipo de fútbol femenino en la liga profesional de los Estados Unidos (que encabeza las más importantes del mundo). Pero no contenta con ello ha llevado su pasión por el deporte rey al campo de la solidaridad y, a través de la oenegé Fútbol sin Fronteras, ha “regalado sonrisas, ilusión y ternura a aquellos que no tienen nada” en África, indicó Moliner.

Asimismo, también es una luchadora incansable por la igualdad de hombres y mujeres y embajadora de ONU Mujeres, como destacó Vicent Sales, quien recordó la multitud de premios que ha recibido por todas estas facetas, entre los que destaca el Isabel Ferrer 2012 de la Generalitat y desde ayer la medalla de Plata de la Diputación Provincial.