Música que remueve las entrañas, que conecta las almas. Música que evoca recuerdos, desata sentimientos y acelera corazones. Música que rinde tributo a quienes fueron y que dejaron impronta, para que siempre permanezcan en la memoria. Y este miércoles, el sonido de decenas de instrumentos tradicionales ha rasgado el cielo de Castelló en el XXI Homenaje de Castelló a la Dolçaina y el Tabal, que además ha rendido tributo a Miquel Mulet i Ortiz, el dolçainer oblidat.
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Homenaje
Este doctor ingeniero industrial, que tuvo una importante labor en la recuperación de la dolçaina, componiendo además más de 35 composiciones para estos instrumentos musicales, algunas de ellas bien conocidas, como Les Cinc Dansetes del Carrer Sant Blai, Monte Cristina, El Roure Valencià o la Garriga.
Pasacalle
Tras el pasacalle de las collas participantes por el corazón de la ciudad las agrupaciones han ido accediendo a la plaza Mayor. En total participó una decena de agrupaciones: les escoles de Dolçaina i Tabal El Primer Molí y de la Colla Xaloc, la Escola Municipal de Dolçaina i Tabal de Castelló. También participó la Associació Cultural de Dolçainers i Tabaleters del Grau, el Grup Castàlia, la Agrupació Musical Xarançaina, la Colla El Soroll, La Nova Escola, y Xaloc.
Presentación
Ha ejercido de presentadora del acto Lledó Ferrando Fabra, componente de la Colla de Dolçainers, Tabaleters i Trabucaires Xaloc, organizadora del evento junto a la Federació de Colles.
Distintivo
Las reinas, Selene Tarín, y Alejandra Sáez, han presidido el acto, junto a su corte de honor, en una plaza que estaba llena hasta la bandera. En el acto se ha hecho un reconocimiento a la figura de Miquel Mulet. Así, a su viuda, Guadalupe Taló, se le ha hecho entrega de la insignia de plata y un ramo de flores, lo mismo que a las reinas. El presidente de la colla Xaloc, Manolo Marco, y el vicepresidente, Ramón Ventura, han subido al escenario para hacer la entrega junto a Juan Pablo Moreno, miembro de la Federación de Collas.
Piezas musicales
La primera obra que se interpretó fue La Garriga obra de Miquel Mulet, que fue ejecutada por miembros de distintas agrupaciones. Estas irían subiendo posteriormente al escenario a interpretar sus propias piezas. Muy evocadora fue la Fanfarria al Papa Luna que interpretó la Escola del Primer Molí, obra de Pep Oria del 2014 con arreglos de Ferran Carceller, creada para conmemorar el 620 aniversario del Papa Luna. Mientras, la Escola Municipal de Dolçaina i Tabal ejecutó Biella Nuey.
Biografía
Miquel Mulet (1926-1987) fue hijo de Carmen Ortiz Sales y José Mulet Vila y padre del exconcejal Miguel Ángel Mulet. Su vida laboral se desarrolló entre Suiza, Madrid y Málaga, pero también tuvo una importante vida social vinculada a Castelló. Aquí ejerció cargos en distintos colectivos, vocal de la Junta del Ateneu, del Casino Antiguo, de la Real Cofradía de Nuestra Señora del Lledó. También fue Prohom dels Cavallers, concejal y teniente de alcalde del Ayuntamiento y presidente de la Junta de Festes. Fue miembro de la Philarmonia de Zúrich y de la Orquesta de Cámara de Castelló. Comprometido en la recuperación del patrimonio, logró salvar del derribo la ermita de Sant Francesc de la Font y propició su restauración posterior. También impulsó la recuperación de Sant Josep de Censal.