El Ayuntamiento de Castelló y Cruz Roja participan en el proyecto Escuela de Segunda Oportunidad, del que 36 jóvenes (25 hombres y 11 mujeres) se han beneficiado durante el primer semestre del año 2019. Esta iniciativa se encarga de ofrecer ayudas formativas y profesionales para jóvenes en abandono escolar, que sufren dificultades en su entorno familiar, que están inmersos en procesos migratorios o jóvenes de 16 a 18 años que tienen medidas de responsabilidad penal.
«El paro juvenil es una de las mayores preocupaciones del equipo de gobierno y proyectos como la Escuela de Segunda Oportunidad contribuyen a frenar esta problemática», ha afirmado el concejal de Juventud, Jorge Ribes, quien añadió que, además, este proyecto también se dirige hacia un sector de jóvenes con alta motivación hacia el trabajo y que pertenecen a hogares con baja intensidad en la ocupación, privación material o que no han tenido oportunidades para poder acceder a formación ocupacional. «La administración ha de saber escuchar y detectar las necesidades de los jóvenes e impulsar su potencial», indicó Ribes. A lo largo del pasado año, fueron 52 el total de jóvenes participantes (34 hombres y 18 mujeres) los que se beneficiaron de las ayudas brindadas por el Ayuntamiento y Cruz Roja.
