A quién no le han multado alguna vez? Todos o casi todos hemos sido pillados in fraganti, al menos, una vez en la vida. Exceso de velocidad, viajar sin el cinturón de seguridad, conducir con el teléfono móvil, aparcar en doble fila, beber un poco más de la cuenta... son algunas de las sanciones al volante que más se repiten. Y se repiten muchas veces. Hoy, la Dirección General de Tráfico (DGT) impondrá en Castellón 171 multas de tráfico. No es una cuestión de adivinanzas. Es la media diaria de sanciones de tráfico contabilizadas en el 2015 en la provincia, un año que se cerró con 62.686 denuncias.
Aunque la mayoría de infractores paga religiosamente, los hay que se hacen los remolones. ¿Cuántos? En Castellón la lista de impagos a la DGT alcanzó a finales del 2015 los 392.869, según datos facilitados por Tráfico a la Fundación Civio. En la Comunitat Valenciana los morosos son más de 2 millones y en el conjunto nacional (están todas las comunidades a excepción de Cataluña y el País Vasco que tienen las competencias trasferidas), la cifra supera los 20 millones.
Pese a que la cantidad de multas impagadas es muy superior en Madrid (2,2 millones), Málaga (1,1 millones) o Valencia (929.992), si se si vinculan las sanciones pendientes de pago por provincia con el parque de vehículos, Castellón se coloca en el puesto número 21. Nada menos que cada automóvil de la provincia tiene de media 0,96 multas pendientes de pago. La palma, no obstante, se la llevan provincias como Cuenca y Teruel, con 3 multas pendientes de pago por cada vehículo.
PENDIENTES DE 420 MILLONES // Los impagos no son un asunto baladí. El Boletín Oficial del Estado (BOE) hizo público hace tan solo unos días las últimas cuentas de la DGT. En el 2014 (no hay datos más recientes), Tráfico recaudó en todo el país 384 millones de euros en multas. El problema es que el importe de las sanciones firmes y pendientes de cobro ascendía este mismo año a 420,3 millones de euros. En Castellón no hay datos globales, pero sí existen de la cantidad de dinero que Tráfico recauda gracias a los radares. Casi 11.300 euros al día en multas. 336.112 al mes. Algo más de cuatro millones al año.
Hay decenas de conductores que no pagan las multas (un porcentaje importante son turistas extranjeros) y los que sí lo hacen tardan un tiempo en abonar la sanción. Y eso que en el año 2009 el Congreso aprobó la reforma de la Ley de Tráfico que incluía el llamado pronto pago y que supone un 50% de descuento en la cuantía de la sanción si esta se abona durante los 20 primeros días de su notificación. Los datos que posee la DGT reflejan que, de media, los conductores de Castellón tardan unos 149 días en pagar las multas. No son los que más se hacen de rogar. En Melilla el tiempo medio de pago asciende a 401 días y en Baleares supera los 200.
Muchas veces el pago de una multa de tráfico se retrasa debido a la interposición de un recurso ante la Administración para intentar que el procedimiento sancionador se quede en nada. Durante el último año los conductores de Castellón han presentado 907 recursos por multas que consideraban injustas o injustificadas. Prosperó un porcentaje muy pequeño de ellos, pues solo se retiraron 122 procesos, el 13%. A nivel nacional el porcentaje de éxito no es mejor: de los 281.876 recursos presentados, se estimaron 32.249, un 11,4%.
Por tipo de infracción, las sanciones más recurridas en la provincia, aunque con poco éxito, son las impuestas por exceso de velocidad, que suponen, además, más del 60% de todas las multas anuales. Pero tan solo el 9,02% de los conductores que recurrieron sus multas tras ser cazados por radares fijos vieron su sanción retirada. En el caso de los radares móviles, el porcentaje de éxito sube hasta el 10,77%. H
