Los municipios de la costa de Castellón concentran a fecha de hoy el 80% de los jubilados extranjeros con residencia habitual en la provincia. Son 11 poblaciones, lideradas por Castelló, Peñíscola y Alcalà de Xivert, aquellas que cuentan con el grueso y donde están empadronados ocho de cada diez foráneos de 65 años o más.

La preferencia por el litoral sobre los enclaves del interior se confirma para este colectivo de 4.273 mayores originarios de otros países pero que han optado por pasar aquí su retiro, ya sea venidos expresamente desde su país de origen o porque llevan asentados ya durante años, por motivos laborales o lazos familiares, y deciden no regresar.

MÁS DE 50, A CERO / En conjunto, en la provincia, la población jubilada asciende a 109.608 personas, de las cuales la cifra de españoles se fija en 105.335, frente a la cuota minoritaria de apenas un 4% de extranjeros, en esta franja de avanzada edad. A lo largo de la provincia tienen presencia en hasta 78 localidades. Sin embargo, hay hasta una cincuentena de municipios donde ningún jubilado extranjero ha fijado su hogar y precisamente coinciden todos ellos con zonas rurales aquejadas por la despoblación.

Como curiosidad figura el caso de aquellos pequeños pueblos donde vive un solo vecino o vecina mayor de otra nacionalidad: Bejís, Benafer, Chóvar, Eslida, Fanzara, Figueroles, la Mata de Morella, Rossell, Sueras, Tales, Teresa, Tírig, la Todolella, Torre d’En Bessora, Vilafranca y Zucaina. Todos ellos, en el interior, salvo la Llosa, enclave de playa.

¿Qué nacionalidades predominan? Lideran el ránking de jubilados con domicilio en la provincia los provenientes de Rumanía, con más de un millar, seguidos por los de Francia, Reino Unido, Alemania, Marruecos, Italia, Holanda, Colombia y Bélgica.