La Policía Nacional reunió ayer en la comisaría de Castellón a directores y responsables de seguridad de entidades bancarias castellonenses para advertirles de las estafas a personas mayores y darles recomendaciones para detectarlas. La reunión se ha celebrado tras registrarse un repunte de los timos a ancianos y denunciarse uno de los casos más graves de los últimos tiempos en la capital, el de un hombre de 74 años al que estafaron un total de 20.000 euros con el tocomocho, tal y como publicó en exclusiva Mediterráneo la semana pasada.

La reunión mantenida en las dependencias policiales se enmarca dentro del plan mayor de seguridad, que desde hace más de siete años se ha implantado en Castellón para prevenir e informar sobre aquellos delitos que afectan a los más vulnerables.

Los investigadores informaron a los responsables de los bancos sobre el modus operandi de los estafadores, que, en su mayoría, buscan a personas mayores, a quienes embaucan para que les den importantes cantidades de dinero. Para ello, las víctimas acuden al banco de forma inesperada y solicitan hacer retiradas de grandes cantidades de efectivo de forma apresurada.

Entre las estafas más populares se encuentran la de la estampita o el tocomocho, aunque en los últimos tiempos existen también timos que han ganado terreno, como el conocido con el nombre de abrazo cariñoso o los hurtos al descuido al pedir una firma. H