Para el sector, sin duda, agosto concentrará más que nunca las vacaciones, pendientes de rebrotes. Y entre julio y septiembre, este último gana adeptos frente al anterior para viajar este verano del covid-19, según un estudio de la consultora Ipsos, debido a que se retrasa la decisión de ir de vacaciones por la incertidumbre laboral, económica y sanitaria. Según la empresa, «la pandemia ha provocado un cambio de hábitos».

Para los empresarios turísticos de Castellón, con todo, septiembre no llega a ser el nuevo julio, puesto que según indica Alexis de Pablo, de Altur-Hosbec, la diferencia de nivel de reservas ahora mismo es mínima.

Con todo, el estudio de tendencias es interesante para una provincia que depende en más del 80% del cliente nacional. El sondeo indica que «un 25% de españoles ya tiene su reserva para viajar de julio a septiembre, pero un 75% aún no la ha formalizado».

Para los expertos, la previsión es que «el fin del estado de alarma provoque un gran número de reservas, como lo demuestra el hecho de que un 43% asegura que piensa reservar próximamente». La deseada última hora, que puede girar la balanza.