Alcaldes del interior de Castellón urgen a adoptar medidas para atajar los accidentes y daños a cultivos que genera la superpoblación de jabalís, tras producirse el sábado el quinto siniestro destacable en menos de un mes.

La alcaldesa de Canet lo Roig, María Ángeles Pallarés, demanda que se realicen más batidas. Considera que la dirección territorial debería controlar especialmente la población de hembras y hacer batidas para que no críen tanto. Según señala, «hay muchos problemas, tanto de accidentes como de ejemplares que se comen los cultivos, ya que al no tener depredadores naturales, se hallan en la cúspide de la cadena». Además, señala que, ahora con las batidas, «se mueven más porque se sienten amenazados».

El alcalde de Sant Rafael del Riu, José Domingo Giner, indica que «cualquier actuación que garantice la seguridad se tendría que hacer». En esta época suele haber accidentes con cerdos salvajes, lo que atribuye a factores como la superpoblación, a la sequía y a la temporada de caza. No obstante, entiende que «achacar la responsabilidad a los cazadores no sería justo». Sugiere activar medidas de seguridad vial, como poner vallas e instalar paneles: «Se señalizan los radares pero no la posible presencia de jabalís; es una incongruencia».

El alcalde de Sant Jordi, Iván Sánchez, dice: «Nosotros tenemos la N-232 que cruza todo el término y dos barrancos y, como mínimo, habría que poner la señalización de peligro». «Tenemos un punto negro en el que todos los años hay accidentes. Habría que señalizar y vallar ese trozo de barranco porque los jabalís tienen siempre el mismo paso».

MEDIDAS // «Después de Sant Jordi siempre hay un sitio donde hay un accidente u otro de jabalí», señala el alcalde de Traiguera, Javier Ferrer, quien añade: «Alguna medida se tiene que activar para que esto no suceda». Si bien no sabe cuál, ya que las «batidas ya se hacen». Sin embargo, admite que ello no impide que un ejemplar pueda salir de cualquier rincón y cruzarse en la calzada.

Sánchez coincide en que cuando el Ayuntamiento, a través del club de caza, solicita realizar batida por daños, los permisos son inmediatos. Han tenido problemas por daños en cultivos de naranjos y también en chalets, donde entran porque está el césped regado y les destrozan los jardines. Y se han autorizado y realizado batidas. «En esta zona hay mucho jabalí», concreta.

Mientras, el alcalde de la Pobla de Benifassà, David Gil, dice que en zonas altas, como la Tinença, no hay tanta población, por la sequía y la falta de alimento. «Ojalá hubiera más, aquí el 90% de cazadores va al jabalí y hay muchos domingos que no se mata ninguno». Sobre las medidas a activar en áreas con superpoblación, apela a dar facilidades a los cazadores para organizar esperas nocturnas y batidas, no darles alimento y controlar la velocidad al volante. De hecho, «en zonas de montaña, donde no se puede circular a la misma velocidad que en llano, esto propicia que los accidentes no pasen del susto».

Cristóbal Segarra, de la Salzadella, señala que todos los años hay accidentes de vecinos que chocan con ellos, aunque en este no ha habido ninguno, si bien asegura desconocer la solución, «porque señales hay», matiza. H